Abandonan cadáver a cinco cuadras de sede de la Policía Metropolitana

Se trata de un homicidio que, al parecer, se cometió en el ‘Bronx’, dos calles de miseria que siguen sin ser recuperadas.

Laura Ardila Arrieta
10 de junio de 2010 - 11:08 p. m.

Como si fuera una película de terror, el hombre apareció en la calle, en medio de la niebla de la madrugada, arrastrando una carretilla de madera (de las que se usan para vender frutas). Caminaba lento, dicen quienes lo vieron bajar del pequeño carro un bulto de cobijas y colchonetas y depositarlo en el suelo, junto a una pila de tierra. Diez de junio de 2010, 2:30 a.m., esquina de la calle 6ª con carrera 19, a cinco cuadras del Comando de la Policía Metropolitana de la ciudad.

Era un cadáver. Un hombre de entre 30 y 40 años de edad. Degollado. Tres policías que vigilaban el sector lo descubrieron después, cuando alcanzaron al hombre de la carretilla que intentaba huir. Ambos —vivo y muerto— eran habitantes de la calle y no han podido ser identificados.

Asustado, el indigente explicó que alguien en la calle del Bronx, ubicada muy cerca del lugar en el que fue capturado, le había ofrecido $600 si se atrevía a sacar el cuerpo de allí y botarlo lejos. Lo único que se le ocurrió fue tratar de camuflarlo entre la arena y las piedras de una obra de pavimentación, sin tener en cuenta la vecindad con las autoridades.

Y cómo, si, después de todo, el Bronx, las dos cuadras de la capital en las que está expresada toda la degradación humana, existe desde hace ocho años prácticamente al lado de la sede principal de la Policía (va de la calle 9ª a la 10ª, entre carreras 15A y 15B, formando una especie de letra P). Ese nuevo Cartucho, como le llaman algunos, habitado por alrededor de cinco mil seres que viven en medio de la miseria, el consumo de drogas y la guerra del microtráfico, sigue siendo, a pesar de algunos esfuerzos estatales, un mundo aparte, por ahora irrecuperable y extraviado. “Hacer operativos en el Bronx es sacarle un balde de agua al mar. Se necesita una intervención social poderosa”, ha reconocido el mayor Carlos Alberto Vanegas, comandante de la localidad de Mártires.

Por su parte, Andrés Restrepo, secretario (e) de Gobierno, explica el plan de recuperación del Bronx ideado por la Administración Distrital y advierte que se trata de un proyecto “a largo plazo”: “Once años demoramos rescatando el Cartucho, por eso la visibilidad de las acciones es muy lenta”.

En el mismo sentido se pronunció el general (r) Luis Alberto Gómez Heredia, encargado por la Alcaldía de coordinar la iniciativa llamada Zonas de Intervención Social Integral, quien manifestó que son muchos los frentes que hay que trabajar para poder reparar el sector algún día. “Por ejemplo, estoy proponiendo una unidad móvil para drogodependientes, pero también habría que promover la reducción del crimen”.

La línea de acción oficial incluye cuatro aspectos concretos: la recuperación del espacio, la gestión de la Policía, la judicialización de los delincuentes y labores sociales integrales. Por ahora, todo en papel. Varios policías que prefirieron no ser identificados contaron que en ocasiones prefieren no entrar al lugar. “¿Qué hace la autoridad allá? Uno trata de hacer cosas, pero ahí la cuestión tiene que ver con lo social, principalmente”.

El indigente anónimo trasladado muerto en una carretilla de frutas es uno más en la fría estadística: según el informe Forensis, de Medicina Legal, el año pasado, 1.649 personas fallecieron por homicidio en la ciudad. De ellos, 293 eran habitantes de la calle.

Por Laura Ardila Arrieta

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