Grupo A
Tolima saldrá a ratificar por qué fue líder
Es un equipo muy fuerte en su casa, donde terminó invicto la primera fase con siete triunfos y dos empates, y con 12 goles anotados y sólo dos recibidos. Su figura, el argentino Rodrigo Marangoni, también es su goleador con siete tantos y Franco Arizala también ha aportado, con cinco.
Tiene una de las mejores defensas del torneo, con sólo 16 goles encajados (promedio de 0,89), aunque marca lo suficiente para ganar: hizo 22 en los 18 juegos. Otra de las deficiencias que debe afrontar es el escaso apoyo que ha tenido de sus hinchas, pues un promedio de 5.274 personas asistieron para ver al que fue líder durante 12 jornadas. En los duelos con sus rivales de grupo: perdió en Medellín con Nacional (2-1) y en Ibagué le ganó al DIM (2-0) y a Equidad (1-0).
Nacional, siempre será favorito
Ganó 18 de los últimos 21 puntos y cerró con tres triunfos al hilo, por eso llega muy fuerte. El mal arranque quedó atrás, aunque sigue lejos del Nacional con el fútbol lírico de otras épocas. El más veterano saca la cara: Sergio Galván es su líder, su goleador (7 tantos) y el ejemplo para una nómina algo inexperta, donde Giovanni Moreno ha tenido sólo chispazos.
El verde fue el mejor visitante de la primera fase con un rendimiento del 51% y su debilidad es que recibe un promedio de 1,06 goles por juego, cuando solo anota 1,11 por encuentro. Conoce esta fase, que ha jugado 10 veces en torneos cortos y ha llegado a seis finales.
Medellín juega bien y gana
Continuidad es la palabra clave en el DIM, que pese al mal arranque mantuvo al cuerpo técnico y al final ganó 22 puntos de 30. El regreso de un líder como John Javier Choronta Restrepo y la llegada del talento de Ómar Pérez han sido claves para lograr el orden táctico dentro y fuera del Atanasio Girardot. Jackson Martínez, con seis dianas, es el máximo anotador del ‘poderoso’.
El DIM pelea en las dos tablas, pues hoy es tercero en la Reclasificación, a tres puntos del líder América, con un rendimiento del 53% en el año.
Se medirá dos veces más con su rival de patio, Nacional, con el que perdió uno (1-0) y ganó otro (2-1) en la primera fase. Con Tolima perdió como visitante (2-0) y a La Equidad le ganó 2-1 en casa.
Equidad, el chico grande de Bogotá
Tres cuadrangulares seguidos y dos finales (contando la de la Copa Colombia) hablan del rendimiento de La Equidad en la primera división, donde se estrenó el año anterior. Dos puntos de 12 en el arranque no auguraban un buen final, sin embargo, gracias al verdadero proceso que han hecho en los últimos tres años, tomaron ritmo y ganaron 19 puntos de los últimos 24.
Es un equipo con una gran riqueza técnica, que se hace muy fuerte de visitante donde ganó el 44% de los puntos. Además, tiene a un goleador en racha como Wilson Carpintero. La Equidad perdió como visitante con Tolima (1-0) y Medellín (2-1), y le ganó a Nacional en casa (1-0).
Grupo B
Júnior, señor del Metropolitano
Tiene la segunda mejor delantera con 27 tantos (1,50 por juego) y es equilibrado, pues en promedio recibió 1,06 tantos por encuentro en la primera fase. Sin el peso de jugar contra el descenso, el equipo de Julio Comesaña promete en los cuadrangulares, porque posee un mediocampo fuerte y experto con Dúmar Rueda y Giovanni Hernández, y una línea de ataque de mucha efectividad con Luis Yánez y Teófilo Gutiérrez, quienes han marcado entre los dos el 55% de los tantos tiburones. Siempre fue el mejor local del torneo (88%) y paradójicamente sólo perdió con el colero Cúcuta Deportivo.
Con sus rivales de grupo le fue bien: le ganó a los dos caleños: 4-3 al América (local) y 2-1 al Cali (visitante). Perdió de visita con Pereira (2-1).
Profesionalismo, clave escarlata
Pese a la crisis económica, el equipo luchó sin pretextos. El técnico Diego Umaña ha moldeado a su antojo este equipo que basó su clasificación en los cinco triunfos seguidos como local y en su gran potencia en el ataque (en casa anotó 18 de sus 25 goles). Ha sido clave el nivel de Adrián Ramos, que juega, hace jugar y además es el goleador (8 tantos). Pablo Armero también destaca con su explosión que desequilibra. Su falencia es que fuera del Pascual Guerrero sólo ganó un juego en este torneo. Como visitante cayó 4-3 con Júnior y 2-1 con Pereira. Al Cali lo apabulló en el clásico por 4-1.
Pereira, remando contra la corriente
El primer objetivo era escapar del descenso y de la promoción, y ese impulso los llevó a estar metido en la fiesta de fin de año. El joven delantero Carlos Darwin Quintero regresó en gran nivel de fútbol de Rusia para contribuir con ocho goles, seis de los cuales sirvieron para que los matecañas cosecharan 13 puntos.
Otra clave del éxito fue el liderazgo de René Higuita en el arco y el buen rendimiento de los extranjeros que contrató, especialmente el de los uruguayos Leonardo Medina (cinco goles) y Juan Martín Parodi (3 anotaciones). Pereira es buen local: ganó 20 de 27 puntos y pasa raspando como visitante (nueve puntos). Le ganó en casa al América y al Júnior (ambos por 2-1) y fue goleado por el Cali (5-0) como visitante.
Cali: de pronóstico reservado
Cali siempre llega con rótulo de favorito, pero no se sabe qué dará en las finales un equipo que sólo ganó tres de los últimos 12 puntos y que clasificó gracias a su gran diferencia de goles.
Además de un técnico con credibilidad dentro del grupo, Cali tiene el mejor promedio ofensivo del torneo Finalización (1,67) y al goleador Freddy Montero (13 tantos). Pero también tiene falencias en la defensa que no le permiten alcanzar el equilibrio, pues le marcaron en promedio 1,17 tantos por juego. Contra sus rivales: perdió en Cali con América (4-1) y con Júnior (1-2), y vapuleó al Pereira (5-0).
Sexto y octavo, ilusionados con las tendencias
En los once torneos anteriores jugados con este sistema en el fútbol colombiano, cinco veces (45%) los finalistas fueron los equipos que entraron a los cuadrangulares en el sexto lugar (Júnior, 2003-I; Medellín, 2004-I; Tolima, 2003-II; Real Cartagena, 2005-II y Cúcuta, 2006-II) los que en tres ocasiones se quedaron con el título.
Deportivo Pereira fue el que quedó en ese puesto en el grupo de los pares y según la tendencia tendrá que luchar muy duro con el octavo, que fue el Cali. En tres ocasiones, un equipo que ha entrado de último ha llegado a la final (Júnior, 2004-II; Pasto, 2004-II y Huila, 2007-I) y dos de ellos ganaron la estrella.
Vale resaltar que en la mayoría de finales (seis) han estado los equipos que han sido primeros en la primera fase: Once Caldas, 2003-I; Cali, 2003-II; Nacional, 2005-I; Cali, 2005-II; Tolima, 2006-II y Nacional, 2007-II. En esas series, cuatro veces los que fueron líderes, ratificaron sus campañas al adjudicarse el título. Tolima sueña de nuevo.