Su experiencia en México, en donde se desempeñaba como director general de ventas de tres canales de distribución de la compañía (Chevrolet, Pontiac y GMC), y el conocimiento global de la industria automotriz, fueron razones suficientes para que su nombre se eligiera para la vicepresidencia comercial de Colmotores, en reemplazo del colombiano Luis Eduardo Martínez.
Y pese a que su estadía en el país todavía es muy corta, desde el primer día que llegó se puso el overol de trabajo, pues considera que su llegada coincide con un momento importante del sector en Colombia. “Hay que ver que el mercado está cambiando y lo importante es tener una visión clara y saber hacia dónde vamos y cuáles son los objetivos. La estrategia de Colmotores es tener los mejores productos y estar atentos a las nuevas oportunidades, con los tratados de libre comercio, y ver cuál es la mejor opción, segmento, por segmento”, afirma el directivo.
El hecho de que la marca del corbatín se haya mantenido como líder en los últimos años es algo muy diciente para Valls y un reto más para su carrera: “Si bien yo voy a hacer énfasis en la innovación y vamos a tener estrategias competitivas, tengo que decir que me impresionó el valor que la marca tiene en Colombia. Eso quiere decir que se ha hecho un buen trabajo y que gracias a ello existe una buena infraestructura en la red. Para nosotros el cliente es lo más importante y saber que el valor de la marca hace la diferencia”.
Tener un conocimiento de un mercado tan competitivo como el mexicano puede resultar fundamental en su nueva etapa, pues sostiene: “Colombia se está enfrentando a un mercado abierto y muy competitivo, como está sucediendo en todo el mundo. Eso sí, tengo que decir que no hay tantas restricciones en el control de emisiones y ruido, pero eso debe tener su razón de ser, pero pienso que hay muchas oportunidades”.
José Valls llega en un momento en el que la industria ha tenido una reducción del 7% con respecto al año anterior y cuando se han presentado algunos síntomas de cambio en la economía. “Pienso que estamos en un momento de evolución y cuando la economía está sufriendo un ajuste, pero pienso que éste sigue siendo el segundo mejor año de la historia en ventas y las cifras presentadas en julio son gratificantes. Acá, con respecto a otros países, hay muchas posibilidades de crecimiento. Los síntomas negativos los vemos como banderas amarillas, hay que oír y no ser necios, pero somos optimistas. En julio hicimos una promoción agresiva y trabajamos en la reducción de costos, logrando cifras importantes, pues con el Spark pasamos de 800 a 2.200 unidades”.
Cuando se le habla de crisis, Valls tiene una respuesta contundente: “¿Cuál crisis? Yo no la veo por ningún lado. Lo que pasa es que los latinos somos o muy dramáticos o muy exaltados. Considero que con lo que se hizo en julio reactivamos el mercado y eso lo logramos siendo competitivos y ajustando nuestros costos de producción”.
Amante del deporte y la competitividad, José Valls es un hombre que se impone metas y las suyas en el país son claras : “Aportar mi experiencia. Sé que la marca está en lo más alto, pero mi trabajo en mercados altamente competitivos puede ayudar a dar una visión y una dirección. Par ello cuento con gente muy preocupada y de un gran nivel académico. Hay muchas cosas en las que hay que evolucionar, porque se viene una competencia muy fuerte, con muchas marcas oportunistas. Pero hay que ser creativos, sagaces y contar con los mejores productos y con calidad en el servicio”.