La "Embajada de los escuadrones de la muerte" es el título del artículo publicado por el abogado Daniel Kovalik en el Huffington Post, uno de los periódicos on line más influyentes del momento en la capital de Estados Unidos. El titular molestó a la embajadora Carolina Barco, quien inmediatamente le solicitó a la publicación que lo cambiara. El Huffington lo quitó de la página, pero para Barco “el daño ya estaba hecho”, afirmó.
El artículo surgió luego de que Wola (Washington Office of Latin America), una reconocida ONG recibiera una amenaza vía e-mail firmada por el bloque central de las ‘Águilas Negras’. En ella declaraban “objetivo militar” a los miembros de Wola y a otros 80 defensores de las minorías por “obstaculizar las políticas del gobierno colombiano y esconderse detrás de una fachada de defensores. Apadrinan la política de Chávez y las Farc”, decía el correo.
De inmediato la organización informó a la prensa, explicando que la amenaza llegó al día siguiente de que miembros de la organización se reunieran con la embajadora en Washington. “Nuestra intención no fue implicar a la embajadora, lo que quisimos fue informar de las muchas amenazas que hemos recibido”, explicó a El Espectador Joy Olson, directora de Wola.
Sin embargo, para Kovalik, quien inspiró su artículo en el comunicado de la ONG, la Embajada y todo lo que ella representa es la voz del gobierno colombiano que, en su opinión, “tiene vínculos con escuadrones de la muerte y debe asumir este hecho”, explicó a este diario el abogado de USW, el poderoso Sindicato de Acero de Estados Unidos y férreo opositor al TLC.
Como si fuera poco, en la misma semana, The Washington Post publicó un artículo que dejó muy mal parado al hermano del presidente Álvaro Uribe, Santiago Uribe, al vincularlo al grupo paramilitar ‘Los doce apóstoles’, con base en el testimonio del ex policía Juan Carlos Meneses. “La reputación y el récord sólido del gobierno colombiano han sido manchados de una manera injusta”, reclamó Barco al periódico.
El diario se limitó a afirmar que sus investigaciones son serias, mientras Barco alista una ofensiva para sortear los escándalos que han rodeado al gobierno y que han ensombrecido sus logros ante los ojos críticos en Washington.