El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, se reunirá este sábado en la Casa Blanca con su similar estadounidense, Barack Obama. Y todo indica que uno de los temas más importantes en la agenda será Sean Goldman, un niño de ocho años.
El asunto, que arrancó como un reclamo judicial y se convirtió en exigencia diplomática, tiene sus orígenes en un divorcio. En 2004 el padre del niño, David Goldman, autorizó su viaje a Brasil con su madre, la brasileña Bruna Bianchi, en lo que él pensaba serían unas vacaciones de dos semanas.
Pero tan pronto aterrizó el avión en Río de Janeiro, Bianchi lo llamó y le dijo que no tenía intenciones de regresar a Estados Unidos, que la única forma de que volviera a ver a Sean sería si obtenía la custodia del niño y que pediría el divorcio.
Mientras Goldman emprendía la batalla legal para volver a ver a su hijo, su ex esposa se casaba de nuevo con el abogado João Paulo Lins, miembro de una tradicional e influyente familia de abogados y jueces.
El padre envió a la justicia brasileña una petición amparada en la Convención de La Haya, tratado que protege los derechos de menores a nivel internacional, pero no tuvo el resultado deseado: un juzgado de Río reconoció, en 2005, que el niño había sido llevado a Brasil de forma equivocada, pero autorizó su estadía porque se había “adaptado a su nuevo hogar”.
El caso sufrió un nuevo giro a finales de 2007 cuando Bianchi murió al dar a luz y la justicia carioca le otorgó al abogado Lins la custodia provisional del niño; además, prohibió que el padre natural lo visitara y logró que ningún medio brasileño publicara la historia.
Pero Goldman no se quedó cruzado de brazos y recurrió al gobierno estadounidense. La semana pasada Hillary Clinton, secretaria de Estado, le pidió al gobierno brasileño que interviniera en el caso y enviara a Sean de vuelta con su padre biológico.
“Un niño pertenece a su familia y no existe razón por la que David Goldman no deba tener a su hijo de vuelta. Esperamos que esto se resuelva muy pronto”, dijo Clinton a la prensa, y denunció 46 casos similares que involucran a Brasil.
El Congreso de EE.UU. también se ha pronunciado: esta semana la Casa de Representantes aprobó con 418 votos una resolución que exige el retorno de Sean al país.
En los últimos días el propio Barack Obama le envió un telegrama de apoyo al padre biológico.
Agenda oficial de Lula y Obama
Con una numerosa delegación de funcionarios viajó el viernes a Washington el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva.
En la reunión que mantendrá hoy con Barack Obama, mandatario estadounidense, Lula abogará por los países latinoamericanos, especialmente por Cuba y Venezuela.
“Deseo que Estados Unidos tenga hacia América Latina una mirada amistosa”, dijo Lula.
Los jefes de Estado conversarán sobre el arancel cobrado por EE.UU. al etanol brasileño, además de temas relacionados con la actual crisis económica mundial.
Lula concluirá su gira el próximo lunes.