Presuntas comisiones millonarias en demandas inexistentes o en expedientes irregulares que pagó el Instituto de Seguros Sociales (ISS), seccional Magdalena, enredan nuevamente al ex presidente del Congreso Miguel Pinedo Vidal, vinculado a la vez al escándalo parapolítico. Al resolver una acusación en contra del ex director del ISS en Magdalena, Nelson Eduardo Vives Lacouture, la Fiscalía compulsó copias para que la Corte Suprema de Justicia investigue al ex parlamentario.
En esencia se trata de establecer si Pinedo Vidal, tal como lo mencionan varios testigos, hizo parte de un carrusel criminal conformado por jueces, abogados y asesores externos del ISS en Magdalena, que defraudó al Estado. El dinero recogido, al parecer, era utilizado por el entonces dirigente de Cambio Radical para financiar sus correrías políticas. Fue la Procuraduría la que le solicitó al ente investigador que se ordenara una indagación en contra de Miguel Pinedo Vidal, pues varios declarantes sostienen que parte de esas ‘mordidas’ que irregularmente canceló el ISS fueron a parar a manos del veterano cacique del Magdalena.
La Fiscalía estableció que funcionarios judiciales tramitaron con una celeridad inusitada procesos ejecutivos contra el ISS sobre los cuales no tenían competencia. Y además, que eran inexistentes o en los cuales los supuestos demandantes ni siquiera tenían contratos con la entidad. En la otra orilla, abogados del ISS, aunque sabían que dichas obligaciones constituían una estafa continuada, no se opusieron a las demandas. El 40% del dinero que un juez de Ciénaga que hacía parte de la organización, Antonio Rafael Vives Cervantes, ordenaba pagar, le correspondía a Nelson Eduardo Vives. El 12% de esos cobros era para el propio juez Vives Cervantes.
El robo continuado fue descubierto, quedando en evidencia el director del ISS de Magdalena y el juez Vives Cervantes, quien aceptó haber cohonestado con esta empresa criminal, se acogió a sentencia anticipada y echó al agua a Nelson Vives. Dijo, por ejemplo, que abogados del ISS como Wilson Ávila, Guillermo Villa y Hugo Quintero le manifestaron que tenían procesos ejecutivos contra el Seguro Social, “donde el 40% de lo que se llegara a pagar sería para Nelson Vives y Miguel Pinedo”. Explicó el ex funcionario que los defensores del ISS renunciaban a defender al Estado, facilitando que los procesos ejecutivos se fallaran en contra de la entidad.
Como si fuera poco, denunció que Nelson Vives, una vez descubierto e investigado, fue a su casa a pedirle “que desapareciera o quemara esos procesos” con el fin de ocultar estas anomalías, agregando que también estaba interesado “en sustraer los procesos del Consejo Seccional de la Judicatura” en donde se investigaba disciplinariamente la conducta de Vives Lacouture. Uno de los abogados del ISS, Wilson Ávila reconoció haber intervenido en el fraude y relató que estaba encargado de servir de enlace entre los promotores de la estafa y el ex juez de Ciénaga, a quien le entregaba su comisión, que oscilaba entre el 12 y el 15% de estos cobros.
De acuerdo con el expediente, conocido por El Espectador, informes del CTI de la Fiscalía dieron cuenta de burdas falsificaciones en las supuestas obligaciones contractuales del ISS y que, por recomendación de Nelson Vives Lacouture, se impartía instrucciones a los abogados para que no se opusieran a las millonarias pretensiones ilegales. Por estos hechos el organismo investigador llamó a juicio a Vives por los delitos de peculado, cohecho y concierto para delinquir.