Óscar de la Renta tiene 77 años y en su cuerpo no hay ningún vestigio de tanto tiempo vivido. Quizás esa elegancia que es capaz de transmitir en cada una de sus prendas es una elegancia —una especie de vitalidad— que habita en su propio cuerpo y que simplemente es capaz de traducir en diseños.
Nació en República Dominicana pero vivió su juventud en España y se hizo maduro y hombre de negocios en Estados Unidos. Trabajó con maestros como Cristóbal Balenciaga y Antonio Castillo y logró convertirse en 1993 en el primer latinoamericano en diseñar para una casa francesa como Pierre Balmain. Colecciona gallos de pelea —de todo el mundo— y le gusta cantar tanto que ya tiene dos discos de boleros, “que suenan muy bien”, confiesa, pero lo que más hace Óscar de la Renta es diseñar, encontrar esa línea exacta en la que los hombros de la mujer se insinúan y seducen y esos cortes en la falda que ciñen la silueta pero le dan una infinita libertad de movimiento.
Óscar de la Renta vuelve después de varios años a Colombia como invitado de honor al Cali Exposhow y tendrá una pasarela el jueves 15 de octubre, a las 8:00 p.m. El Espectador quiso saber algo más de su atractivo mundo y de esas prendas que desfilarán con la intención evidente de conquistar a todas las mujeres.
Ahora que usted se encuentra en la cima del mundo de la moda, ¿qué cree de la moda latinoamericana?
Nosotros ya quemamos conceptos como “moda latinoamericana”, la moda es global. Yo nunca me he visto como un diseñador latinoamericano, claro que estoy muy orgulloso de mis pasados y mi proveniencia y ciertamente tener un claro entendimiento de quién eres y de dónde vienes es muy importante, pero hay muchos bagajes que tienes que dejar atrás porque hoy la moda es global y habla ese lenguaje. Si quieres ser exitoso en un mercado pequeño, entonces te conviertes en un diseñador pequeño. Si te quieres convertir en un gran diseñador, tienes que pensar en todo el mundo a la vez.
Uno en la moda no reconoce nacionalidades ni procedencias, mucha gente me pregunta qué creo sobre la mujer latinoamericana y creo que esa pregunta subestima a las mujeres porque hoy en un mercado o en un aeropuerto es casi imposible reconocer la nacionalidad de una mujer por lo que está usando, quizás hayan muchas más condiciones que repercutan en cómo las mujeres se visten, como su ánimo y el clima. Hoy el consumidor más importante es la mujer trabajadora y eso es lo más excitante para un diseñador: crear ropa para un ser que como nunca antes en la historia de los tiempos tuvo tal control sobre su destino y eso es realmente lo que determina la moda de nuestros días.
¿Cuál diría que es el verdadero poder de la moda?
El verdadero poder de la moda diría que es el poder de crear tendencias, de dirigir el gusto y decir qué está dentro y qué está fuera. El poder de la moda es crear una base de consumidores que entiendan lo que tú haces, que comulguen con esos modos de vidas que tú estás proponiendo y reinterpretando en tus costuras y que vayan y los compren. Aunque hoy infortunadamente hay muchos diseñadores talentosos que se hacen famosos antes de haber vendido incluso un solo vestido. Para mí el poder de la moda es vender vestidos que dan felicidad, que te potencian, que te hacen más bella.
¿Cuál fue la primera pieza o colección en la que usted sintió que había encontrado su estilo?
Mmm... ya no tengo tanta memoria para poder decir con certeza cosas como ésas. Yo creo que mi moda es mucho de lo que he hecho, de lo que hago ahora y lo que haré en el futuro. La moda es acerca de los tiempos, acerca del hoy, es el reflejo de los tiempos en los que vivimos y creo que si te dijera que hice mi mejor trabajo hace 10 años atrás, entonces debía haber parado entonces. Uno es tan bueno como es su última colección, esa es la verdadera realidad que nosotros tenemos que enfrentar cada temporada. La gente me pregunta: “Tú has hecho esto por muchos años, ¿hasta cuándo lo vas a hacer?”, y mi respuesta es muy sencilla: cada día para mí hay un reto, cada día hay algo que tengo que aprender, el día que diga “lo sé todo sobre mi trabajo” entonces tendré que parar y despedirme.
¿Correría el riesgo de explicarnos por qué los hombres entienden también el cuerpo de las mujeres?
Yo amo a las mujeres, mi papel, del que nunca me he distanciado, mi filosofía como diseñador es crear bellas mujeres y extraer de ellas todo el potencial de su belleza. Nunca me he alejado de eso y creo que hoy es un importante punto para mí. Pero además creo que los hombres nos acercamos al cuerpo de la mujer con menos complejos y rechazos, para nosotros es un cuerpo idealizado y maravilloso.
Recuerdo los tiempos cuando las mujeres que querían entrar al mundo del trabajo tuvieron que imitar los cánones masculinos incluso para el vestir, pero siempre supe que esa era una vía equivocada. Ahora sabemos cuál es el verdadero poder de la feminidad, incluso en el mundo laboral, hoy esa mujer sabe cuál es la importancia y cuán estratégico resulta explotar esa feminidad y mi ropa es una aliada en esa tarea.
Proveer de eso a las mujeres hoy nos resulta a los hombres incluso mucho más complicado. Hoy no hay lealtad de las consumidoras, porque para ellas no es tan importante de quién es la ropa que está usando, como que esa ropa que está usando refleje el sentido de individualidad que ella desea proyectar.
¿Cree que el concepto de Alta Costura, de esa moda carísima casi teatral ha quedado atrás?
Como probablemente usted sabe yo hace rato no hago colecciones de Alta Costura. Yo tuve suficiente de la Alta Costura hace muchos años y la razón por la que llegué a Estados Unidos fue porque creí que el futuro de la moda estaba en el ready to wear, es decir, en el vestido de lujo pero más masivo. La Alta Costura es una ropa increíblemente bella que para los diseñadores ciertamente requiere una forma muy privilegiada de trabajo que quizá ya no está en consonancia con los requerimientos de nuestros tiempos. Pero además, el público para la Alta Costura es increíblemente pequeño. Hay muy pocos clientes que tienen el dinero o el nivel de gusto, que es quizá más importante, para apreciar y entender lo que son estas extensísimas piezas de arte. Hoy, con excepción de que sientas que ninguna talla, ni marca te horma muy bien, tú puedes comprar prendas con extraordinario valor estilístico y que te quedan perfectas sin necesidad de pagar cantidades indecibles de dinero y esas prendas que compras en los almacenes se acogen sin duda al estilo que requiere la mujer moderna.
La Alta Costura es más ahora una labor artesanal que sirve para vender otros productos, como zapatos, pintalabios y perfumes, y eso me parece lamentable.
¿Nos puede dar un adelanto de lo que veremos en la pasarela del Cali Exposhow?
Mostraré una resort collection que ha funcionado increíblemente bien en Nueva York. Yo ya he estado algunas veces en Colombia, años atrás visité Medellín, estoy buscando ir a Cali y hacer que los consumidores entiendan y se enamoren de mis apuestas.
Un fuerte twist francés aterrizará en Cali, esta es una colección sobre la buena vida, sobre las vacaciones o por lo menos la necesidad de unas. Será un viaje en un crucero en donde el chic parisino se fusiona con el patriotismo americano con series que trabajan el rojo, el blanco y el azul. También habrá sorpresas de vestidos muy optimistas con volúmenes, rosas y vuelos maravillosos.
Cali tiene su propia fiesta de la moda
Este martes 13 de octubre se iniciará la versión del Cali Exposhow 2009, una feria de salud, belleza y moda que ha logrado posicionarse año tras año a tal punto que consolida su lugar en el calendario de la moda trayendo a un invitado especial de la talla de Óscar de la Renta.
La programación de pasarelas empezará con los desfiles de Yanbal en el que las protagonistas serán Amalín y Judy Hazbún, Pepa Pombo, Mónica Holguín y Julia de Rodríguez e hijos.
El miércoles estarán los diseñadores Leal Daccarett, Agua Bendita, María Elena Villamil y Andrés Otálora. El jueves el personaje, a las 8:00 de la noche, será Óscar de la Renta, y el viernes Ricardo Pava y Johana Ortiz llenarán de elegancia la moda femenina y masculina.
Esta intensa semana de buen diseño se clausurará el sábado con Hernán Zajar y Franchesca Miranda.