Si los retrasos por las obras de repavimentación de la pista norte del aeropuerto Eldorado generaban el 60% de demoras en los vuelos, ahora se incrementará más cuando se inicien las obras en otros 500 metros de la pista.
Esta situación tiene las alarmas prendidas de las aerolíneas, de la Aeronáutica y del concesionario Opaín, debido a que de los 3.800 metros de la pista, sólo se podrán utilizar 1.800, es decir, que la restricción permitirá únicamente la operación de aviones pequeños. De acuerdo con Claudia Velásquez, de la Asociación de Transporte Aéreo en Colombia (ATAC), lo más preocupante está por venir.
Los trabajos que comienzan hoy concluirán el 8 de septiembre y ese mismo día empezará la reparación del centro de la pista, lo que obligará al cierre total de las operaciones, lo que generará un cuello de botella en la pista sur, que también tiene restricciones por materia de ruido.
El manejo de las aerolíneas tiene hoy un sobrecosto que no ha sido divulgado para proteger su competitividad frente a las otras compañías.
De acuerdo con el gerente de operaciones del concesionario Opaín, Michael Nicolaas, las mediciones del On Time Performance (operación a tiempo) establecen que los retrasos en los vuelos no pueden estar por encima del 65%, de lo contrario el aeropuerto no sería competitivo y ninguna aerolínea querría venir porque se generarían problemas de conectividad.
En la actualidad ese indicador está en 60% y podría afectarse más con el cierre que se inicia hoy y el que se tendrá entre el 8 de septiembre y la primera quincena de octubre, explicó Nicolaas.
Por esta razón se está analizando la posibilidad de juntar vuelos de aerolíneas para permitir la reducción de las demoras y de paso para aumentar la ocupación de las aerolíneas.
Cada semana se están estudiando los indicadores para poder tomar medidas de contingencia, señaló la ATAC.