La primera vez que escuchó aquel nombre, Nicanor Restrepo estaba muy pequeño. En la casa de su infancia, entre ires y venires, conversaciones importantes y repasos genealógicos que incluían a los ex presidentes Tomás Cipriano de Mosquera y Pedro Alcántara Herrán, sus ancestros directos, escuchaba que su tío había sido uno de los fundadores del gremio empresarial del país.
Es un recuerdo que vino a su memoria ayer, cuando la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi) le otorgó la orden José Gutiérrez Gómez "por su liderazgo de más de 38 años en el campo textil, financiero e inmobiliario", entre otros.
"De niño escuchaba hablar en la casa de la institución que trabajaba por la salvaguardia de la democracia", recordó Restrepo con un tranquilo acento paisa de eses marcadas ante los más de 50 empresarios reunidos en la sede de la Andi para presenciar la ceremonia.
Fue un acto muy sencillo, en consonancia con la personalidad del empresario, renuente a los actos públicos, de hablar pausado y cauteloso cuando tiene al frente una cámara. La misma actitud con que en 2004, tras liderar por 16 años las riendas del Grupo Empresarial Antioqueño y orientarlo hacia el mercado internacional, abandonó el alto perfil que había asumido por tanto tiempo y se refugió en la rigurosidad del trabajo de tesis que acaba de entregar para optar por el título de Doctor en Ciencias Comparadas, de la Escuela de Altos Estudios de Ciencias Sociales de París.
Restrepo, el eterno candidato de la prensa y de los rumores de alta sociedad para ocupar un cargo público, escuchó ayer en silencio, con la cabeza baja, la larga lista de razones que Luis Carlos Villegas, presidente de la Andi, justificó para otorgar la condecoración. Y sonrió cuando el dirigente gremial habló de una hipotética negociación de paz: "Y ojalá, doctor Nicanor, usted nos acompañe en este recorrido como lo hicimos en 1999".
Pero los asistentes pasaron este punto por alto. Más ocupados en las pantallas de sus Blackberry, sólo interrumpieron el tecleo constante para aplaudir la imposición de la medalla y levantaron la mirada por breves minutos durante el discurso del homenajeado, quien comentaba que el crecimiento debía ir de la mano del compromiso social.
"Una sociedad no puede garantizar los derechos si no genera riqueza", aseguró.
A la salida, tras el abrazo de su esposa y la felicitación de algunos empresarios, Restrepo aceptó responder a los periodistas que lo bombardearon con preguntas sobre la actual campaña presidencial del país.
"No estoy siguiendo el debate. Vivo un poco lejos de Colombia", se excusó, pero dijo, con un interés especial, que el país debía crecer a una tasa superior al 5% anual para transitar por la ruta del progreso: "Si no se mejoran los mecanismos de redistribución de riqueza y crecemos a ese ritmo, quedaremos en las mismas".
Tampoco le encontró mucho futuro al trámite del TLC entre Colombia y Estados Unidos, y otra vez negó un rumor que lo liga a un candidato presidencial: "Estoy totalmente desvinculado de la vida pública desde hace 26 años, cuando dejé de ser gobernador de Antioquia". Con los micrófonos apagados, reconoció que su única motivación es continuar sus estudios académicos en Francia.