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La ceremonia de iniciación

Para poder pertenecer a la Orden Masónica la persona interesada se debe someter a una votación, que es secreta (es prohibido revelarla) y que se realiza depositando en una bolsa pelotas blancas y negras.

El Espectador
28 de marzo de 2009 - 08:00 a. m.

Si llega a salir una sola bola negra el proceso se da por finalizado. Pero si todas son blancas se da inicio a un misterioso y curioso ritual. 

Los masones no pueden revelar los detalles de lo que ocurre en esta ceremonia; sin embargo, la información se ha colado hasta en internet, en donde se pueden descargar fotografías y videos.

El futuro integrante de esta Orden debe vendarse los ojos, descubrirse un hombro y un pie. Luego aceptar una serie de compromisos con sus nuevos hermanos y poner al servicio de la logia sus conocimientos.

El jefe máximo, al que llaman Gran Arquitecto del Universo, se encarga de sellar esta promesa y de darle la bienvenida al nuevo miembro, quien comienza como aprendiz, la categoría base.

A partir de ese momento empieza su lucha por convertirse en un mejor ser humano y cumplir los principios básicos de la masonería: igualdad, libertad, fraternidad y respeto por la diversidad de pensamiento. Además, se debe procurar no entablar discusiones políticas ni religiosas.

De su comportamiento depende que pueda seguir escalando posiciones. La mayoría de los masones llegan al grado de maestros, pero hay quienes anhelan ocupar cargos directivos.

La Orden Masona en Colombia

Corría el año de 1789 cuando Antonio Nariño, el primer traductor de Los Derechos del Hombre, trajo las ideas de la Orden de los Masones a nuestro país. Sin embargo, es sólo hasta el 19 de febrero de 1922 que se fundó la primera Gran Logia Masónica de Colombia de la mano de Arturo Pardo Morales.

La influencia de los masones se siente en varios ámbitos de la vida nacional. En primer lugar está el político, pues más de 40 presidentes fueron masones; también la educación: su legado está detrás de la apertura de la Universidad Nacional y la  Jorge Tadeo Lozano, uno de cuyos fundadores, Joaquín Molano Campuzano, también fue un notable masón.

De la misma forma, la mano masona está detrás de la apertura de la Universidad Libre con Benjamín Herrera a la cabeza.

Los presidentes masones

En Colombia, 42 presidentes han llegado al grado de gran maestro de la Orden de los Masones desde mucho antes de que se estableciera oficialmente la Gran Logia Masónica de Colombia, en 1922.

Entre algunos de los primeros presidentes miembros salen a relucir los nombres de Antonio Nariño, quien introdujo la masonería en el país, Simón Bolívar y Francisco de Paula Santander. Le siguen algunos mandatarios como Tomás Cipriano de Mosquera, José Hilario López, Rafael Núñez, Eduardo Santos Montejo, Darío Echandía y Alberto Lleras Camargo.

Los masones y las mujeres

Los hombres son los únicos que pueden pertenecer a la Orden de los Masones. Sin embargo, durante la Revolución Francesa un grupo de integrantes de esta hermandad se apartó de las normas y decidió que había llegado la hora de abrirles la puerta a las mujeres.

La esposa de Napoleón, la emperatriz Josefina, fue una de las primeras en formar parte de esta orden. En Colombia, aunque hay logias integradas únicamente por representantes del género femenino, se intentó preservar la tradición. Por ello se creó un grupo, al que bautizaron Estrella de Oriente, integrado por las hermanas, hijas, esposas y madres de los masones.

Al igual que los hombres, ellas también deben asistir a una ceremonia de iniciación, reunirse con frecuencia y cumplir con los códigos y compromisos que adquieren cuando son aceptadas. Asimismo, pueden decidir si quieren ser masones para toda la vida o renunciar a esto en algún momento determinado de sus vidas.

Por El Espectador

 

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