Según el más reciente informe del Observatorio de emancipación del Consejo de la Juventud de España, organismo adscrito al Ministerio de Sanidad, casi todos los jóvenes españoles viven en casa de sus padres. “Solo el 22,1% de los menores de 30 años reside fuera de su hogar de origen”
El informe revela -como lo reseña el periódico El País- “solo el 7,2% de jóvenes entre 16 y 24 años vive fuera de casa, entre 25 y 29 años la cifra supera el 40%. Y entre los que han superado la treintena, el porcentaje es mayoritario: el 72,9% de quienes tienen entre 30 y 34 años se han ido de casa”.
Una de las principales razones por las cuales los jóvenes envejecen en casa de sus padres es que para comprar una casa deben emplear más de la mitad de su sueldo. El salario medio anual es de 13.659,52 euros y para comprar una casa, deben emplear más de la mitad de su sueldo (el 54,2%) y para alquilarla, el 47,4%, lo cual es poco usual, teniendo en cuenta además que “los bancos no conceden cuotas de hipotecas que supongan destinar más del 30% del salario a pagarla”, por tanto los jóvenes no están dedicando un porcentaje de su sueldo a comprar una casa.
Estos datos coinciden con la elevada tasa de desempleo, el 66% de quienes solo tienen estudios primarios (unos 287.000) no tienen empleo. “Este dato baja hasta un no menos alarmante 51,4% para los 680.000 que han acabado los estudios secundarios y afecta a un tercio de los 411.433 que tienen estudios universitarios”, precisa el diario de mayor circulación en España y añade que: nueve de cada 10 empleos registrados en el primer trimestre de 2013 fueron temporales.
Más de la mitad de los menores de 30 que están asalariados están sobrecualificados, tiene un empleo para el que se requiere menor cualificación que la que han adquirido; y un 23% de los menores de 30 años, están, además, “subocupados” (trabajan un número de horas insuficiente en relación con su disponibilidad laboral).