Mateo Gough, un paracaidista británico de 25 años estuvo a punto de morir tras realizar un salto de base a un acantilado.
El salto Base es una modalidad del paracaidismo, consistente en saltar desde un objeto fijo y no desde una aeronave en vuelo (como tradicionalmente se hace). (Ver video)
El término Base en inglés hace alusión a las cuatro categorías de objetos fijos desde donde se puede saltar mediante esta práctica deportiva extrema. (Edificio, Antena (chimeneas o torres de tendido eléctrico también entran en esta categoría), Puente y Tierra (precipicio o formación natural).
El deportista extremo realizó un salto de caída libre desde una montaña de unos 300 metros cerca del lago de Garda, en el norte de Italia.
Una videocámara en su casco grabó la forma milagrosa en que se salvó el joven.
Mateo Gough, de 25 años, había completado con éxito más de 700 saltos con paracaídas y 180 saltos de Base donde se usa un traje especial para poder volar y experimentar la sensación de una caída libre.
En su intento por lograr su salto base número 181 se enfrentó cara a cara con la muerte. La cámara en el casco de Gough registró todo el salto, los gritos y su caída.
Pese a rebotar por las laderas del acantilado y estrellarse contra la tierra, este arriesgado aventurero sufrió heridas menores.
Gough contó que todo iba bien al principio y que las condiciones climáticas eran las adecuadas, pero que unos fallos en su equipo de salto lo desequilibraron.
"Cuando toqué tierra me encontraba en estado shock y dudando si aún seguía con vida", confesó Gough que actualmente se encuentra en su ciudad natal, Birmingham, en Reino Unido, donde se recupera de sus heridas.