Los habitantes del sector ‘El progreso’ en el barrio La Boquilla, en Cartagena, viven prácticamente entre la basura. Caminan por entre bolsas plásticas, latas, aguas negras provenientes de acueductos rebosados. Pululan ratas y cucarachas. El alumbrado público es escaso. Desde hace 23 años los vecinos de ‘El progreso’ intentan rehacer sus propias calles con escombros —porque los impuestos que pagan no se ven invertidos en esta zona marginal— pero cada aguacero transforma sus esfuerzos en un lodazal.
Irónicamente, en días pasados los niños del barrio salieron esquivando los charcos que inundaban las calles (cayó un aguacero la noche anterior), para ir a participar en una limpieza masiva de las playas que quedan a 100 metros de sus viviendas.
“Pero las playas están limpias, ojalá vengan a limpiar las calles. Los boquilleros haríamos fiesta”, aseguró Víctor Colón, de 14 años, mientras intentaba arrastrar un costal repleto de desechos junto a John Edward Valiente, de 12, Luis Daniel Gómez, de 8, y Emérito García, de 11. Ellos fueron cuatro entre los cerca de 700 voluntarios que se unieron en Cartagena a la edición número 15 de la jornada nacional de limpieza del agua y las costas, una iniciativa de la empresa petrolera Exxon Mobile y una serie de empresas internacionales, con el aval del Ministerio de Ambiente Vivienda y Desarrollo Territorialy el Ideam.
A la jornada también se sumaron los oficiales de la guardia ambiental, quienes realizaron una limpieza submarina. La misma actividad se realizó en otros 12 puntos de ocho departamentos del país. El resultado, según los organizadores, fue positivo: se recogieron casi la mitad de toneladas de basura que el año anterior, lo que quiere decir que disminuyó la basura en el mar.
Según las cifras oficiales en el país se producen 28.800 toneladas de residuos sólidos al día. Y de este total el 0,28% (63 toneladas diariamente) se vierten en cuerpos de agua.