:format(jpeg)/www.elespectador.comhttp://thumbor-prod-us-east-1.photo.aws.arc.pub/vjHnzr6Ijy9R_wpORU_pTDuJ9i8=/arc-anglerfish-arc2-prod-elespectador/public/Q2COPKXEWBFSNFQV42WOT7XITM.jpg)
A finales de enero de 2016, la Policía Metropolitana de Bogotá realizó una serie de desalojos a trabajadoras sexuales que se encontraban en la Plaza de la Mariposa, ubicada en el sector de San Victorino, en el centro de Bogotá. Sin embargo, el operativo incluyó detención y exceso de fuerza contra otras mujeres que no tenían nada que ver, incluidas menores de edad.
Tras el posible abuso policial, se reunieron miembros de la Policía, del Distrito (Secretaría de Gobierno y Secretaría de la Mujer), de la Defensoría del Pueblo y de la Organización Parces, para buscar acuerdos con los que se definiera la manera de ejercer el derecho al trabajo de las mujeres, sin que se vulneraran sus derechos.
La Alcaldía de Bogotá manifestó este martes su apoyo a la comunidad LGBTI, asegurando que reforzará el trabajo con la Policía Metropolitana de Bogotá con el fin de evitar abusos por parte de los uniformados a los miembros de la comunidad, y especialmente a transgéneros, que históricamente ha sido la población que más ha sufrido excesos de fuerza y autoridad por parte de los miembros de la institución.
La directora de Derechos Humanos y Apoyo a la Justicia de la Secretaría de Gobierno, Diana Rodríguez, aseguró que quieren “fortalecer la manera en que la Policía se está aproximando a la población y el trato que se da y creemos que eso se genera a través de la prevención y la capacitación desde los rangos altos pero también con el policía que está día a día en contacto con la gente”.
Rodríguez indicó que el objetivo del Distrito es lograr estrechar lazos con la dirección de Derechos Humanos de la Policía Metropolitana de Bogotá, con la que se establecerán protocolos de atención. Asimismo, la iniciativa busca que los ciudadanos denuncien actos irregulares de violencia contra la comunidad LGBTI, con el fin de tomar acciones.
“Se presentan denuncias pero queremos que se realicen más. Realmente para nosotros no es un problema porque eso quiere decir que la población está perdiendo el miedo. Uno de las dificultades es la ausencia de denuncia, si no la hay no podemos conocer qué es lo que está pasando, entonces la idea es que se haga para tomar las medidas pertinentes”, agregó la funcionaria.
La segunda estrategia de la Administración Distrital para garantizar los derechos de la población LGBTI, será la construcción de una casa refugio. La idea es que allí se brinde protección y ayuda a las víctimas de violencia por su género u orientación sexual.
“No tiene valor ni intermediarios. La ubicación no es pública con el fin de garantizar la seguridad de las personas que se encuentran allí. Las víctimas pueden acercarse a la Secretaría de Gobierno o a cualquier secretaría involucrada con la implementación de la política pública como Integración Social, Salud, Planeación, y Secretaría de la Mujer”, indicó la directora de Derechos Humanos y Apoyo a la Justicia de la Secretaría de Gobierno.
Tras ser interpuesta la denuncia, el Distrito realizará un trabajo de acompañamiento psicosocial y jurídico, y dependiendo del caso la víctima es remitida a la Casa Refugio LGBTI. En el lugar, cada persona puede permanecer por un periodo de tres meses.
Según el último reporte de la ONG Colombia Diversa, entre 2013 y 2014 se presentaron 222 casos de abuso policial contra miembros de la población LGBTI. De los ataques, 110 fueron a personas transgénero, y 28 ocurrieron en Bogotá.