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Van más de 350 hectáreas de bosque arrasadas por incendios

Unas 28 mil personas han sido afectadas por las conflagraciones, que motivaron la declaratoria de alerta naranja en Cundinamarca.

El Espectador
05 de enero de 2010 - 12:35 p. m.

Miles de hombres de los organismos de emergencia intentan impedir la propagación de esta tragedia ambiental, que ha producido que centenares de hectáreas de bosques sean consumidas por las llamas en varios municipios cundinamarqueces y en la periferia de Bogotá.

De acuerdo con el gobernador de Cundinamarca, Andrés González, en Cundinamarca se declaró la alerta naranja, toda vez que 37 municipios han resultado afectados, especialmente Cajicá y Tabio. Dicha alerta significa emergencia general, que implica acciones más rápidas y más pie de fuerza ante los incendios.

En Bogotá, la zona conocida como los Tanques del Silencio sufrió una impresionante conflagración que se acercó a las áreas residenciales de la periferia de la capital de la República y tiene alarmada a toda la comunidad. Así lo admitió Mauricio Toro, jefe del Cuerpo de Bomberos de Bogota, quien manifestó que este organismo de emergencia se encuentra efectuando ingentes esfuerzos para controlar las llamas en cerros del suroriente de la capital.

Toro manifestó que se trata de un "incendio copa", que hace que el fuego se desplace entre las ramas de la parte alta de los árboles y, poco a poco, ha ido consumiendo la vegetación. Se espera que en las próximas horas hagan presencia los helicópteros de la Fuerza Aérea Colombiana que asistieron las operaciones que sofocaron parte de las llamas en las localidades bogotanas de San Cristóbal y Usme.

Además de los seis incendios que se presentaron el domingo anterior, cinco de los cuales fueron controlados por los Bomberos, sólo en la tarde del lunes se ha presentaron tres nuevas conflagraciones. Toro apuntó a decir que, desafortunadamente, muchos de los incendios se han presentado por la imprudencia de la gente, al prender fuego donde no debe o dejar colillas de cigarrillo prendidas o secuelas de un asado, entre otras razones.

De igual forma, recordó las recomendaciones para toda la ciudadanía, de manera que se mantenga la calma y esté atenta a informar oportunamente sobre este tipo de acontecimientos, que estuvieron a punto de consumir en llamas un conjunto residencial cercano a la zona conocida como Santa Rosa, este fin de semana.

El incendio en el sector conocido como "El tanque del silencio" parece no dar tregua, pues pese a la presencia de los helicópteros de la Fuerza Aérea y las grandes descargas de agua, las llamas amenazan con propagarse por el costado oriental de los cerros tutelares.

Por El Espectador

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