Luego de que Transvial le ofreciera al IDU tres alternativas para construir la calle 26, que consistían en ceder el contrato, cederlo parcialmente o permitirles seguir con la obra, el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) confirmó que éste entrará en proceso de caducidad.
La Unión Temporal Transvial aseguró que la caducidad del contrato está ligado a varios trámites que se deben cumplir obligatoriamente y que por lo tanto las obras de la calle 26 tardarán más tiempo hasta que se adjudique un nuevo contratista.
Transvial advirtió que el paso a seguir es cumplir con ciertas diligencias y protocolos, lo que harán legal el proceso de caducidad. El comunicado del consorcio señala que si el IDU desestima los argumentos presentados por la Unión Temporal el procedimiento a seguir es que mediante un acto administrativo se decretará la caducidad y se enviará una citación para que el contratista se acerque a las instalaciones de la entidad a notificarse.
Si el consorcio interpone la reposición del contrato, la caducidad no quedaría oficializada hasta que se resuelva ese recurso, es decir hasta mayo de 2010, lo que indica que hasta ese mes no se podría dar inicio a una nueva licitación.
Así las cosas, el alcalde de Bogotá, Samuel Moreno, dijo que esperará hasta el 5 de febrero para que Segurexpo (empresa aseguradora de Transvial), responda a las observaciones hechas por la Contraloría. Se estima que un nuevo proceso de licitación duraría cerca de tres meses como mínimo, de manera que la construcción de la Tercera Fase de Transmilenio por la calle 26 empezaría de cero. Por ahora, las obras paralizadas en la 26 hacen parte del diario vivir de los capitalinos.
Los grupos Solarte, Ortiz de España, Colpatria o Álvarez &Collins suenan como posible alternativas para asumir las obras. Juan Pablo Luque, presidente de Segurexpo (empresa aseguradora de Transvial), había señalado que la caducidad implicaría para el Distrito pérdidas superiores a los 315.000 millones de pesos.