Publicidad

Coletazo del predial: 1.400 colegios privados de Bogotá estarían al borde de la quiebra

Mientras instituciones advierten que ante los topes no tendrían de otra que trasladarles los costos a padres o cerrar, Distrito dice que colegios cuentan con beneficios tributarios.

Redacción Bogotá
26 de julio de 2016 - 09:02 p. m.
David Campuzano - Elespectador.com
David Campuzano - Elespectador.com

Pasar de pagar $50 millones por concepto del predial hace cinco años a $550 millones hoy en día. Esa es la realidad de muchos colegios privados de Bogotá que ante los topes que ha alcanzado el impuesto ya contemplan trasladar –de algún modo– los altísimos costos a los padres de familia e incluso, cerrar las instituciones.

Los colegios advierten que la situación se está haciendo insostenible y no es para menos: según la Asociación Colombiana de Educación Privada el dinero que reciben por concepto de matrículas y mensualidades ya no les alcanza para cubrir sus gastos, pues lo que están pagando por el predial –cuyo monto según la agremiación ha aumentado, en promedio, de cinco a 10 veces– supera los ingresos que reciben.

Por esta razón, las instituciones privadas piden pista en la discusión que por estos días adelanta el Concejo de Bogotá, que decidirá si da su visto bueno para que la Administración Distrital modifique la forma como se cobra el impuesto en la capital. La pretensión de los colegios es quedar exentos del pago, tal como lo estuvieron las instituciones de educación superior hasta 1994. (Lea: Así es el revolcón que propone el Distrito al pago del impuesto predial)

“En los últimos cinco años ha aumentado el valor del predial de cinco a 10 veces en los colegios, mientras que nuestras tarifas (lo que le podemos cobrar a los padres de familia por ley) apenas corresponde al índice de inflación (6,77%). Hay unas desproporciones entre los ingresos que recibimos los colegios y lo que tenemos que gastar en el impuesto predial”, argumenta Juan Antonio Rodríguez, presidente de la Asociación, en diálogo con El Espectador.

Según Rodríguez, el pago del gravamen está haciendo inviables a más de 1.400 colegios e incluso, va más allá: de seguir los cobros desproporcionados muchas instituciones no tendrían otro camino que cerrar. “Si la fuente de ingresos de los colegios privados son los padres de familia pues la única manera de recoger ese dinero sería incrementar los costos educativos, lo cual encarece la educación de una forma grave. La otra opción sería cerrarlos”.

Mientras que la Asociación espera que su clamor llegue a oídos del Concejo, la propuesta ya ha tenido eco en el Congreso de la República. El representante a la Cámara por Bogotá, Samuel Hoyos (Centro Democrático) asegura que el pago del predial “se ha convertido en un impuesto confiscatorio” que hoy tiene en riesgo a la educación privada de la ciudad y que ha obligado a muchos estudiantes a migrar a municipios cercanos para estudiar.

“Existen casos de colegios en los que el impuesto ha aumentado en un 1.000% en un periodo de cinco años, mientras que el valor de la matricula solo puede aumentar de acuerdo con la inflación, lo que hace insostenible su operación y va en detrimento de la calidad de la educación”, advierte el congresista.

Hoyos, quien anunció que solicitará a la Administración de Enrique Peñalosa eximir del pago de este impuesto a las instituciones, argumenta que con la exoneración no se afectarían las finanzas de la ciudad. “La reducción en el recaudo, según algunos cálculos, no sería mayor a $60 mil millones, y el beneficio que puede generar, al reinvertir ese dinero en educación, es incalculable. Se deben y pueden gravar otras actividades, sin embargo, hacerlo con la educación es regresivo y absurdo”, precisa.

El presidente de la Asociación Colombiana de Educación Privada agrega que las instituciones además deben responder por gastos en materia de infraestructura y mantenimiento –de cara a cumplir con el reforzamiento estructural y el adecuamiento arquitectónico de los planteles– por lo que dice que es una obligación del Estado ayudar a la adecuada prestación de la educación como un servicio público.

Mientras los colegios aguardan porque el tema sea tratado en el Concejo, el Distrito descarta de momento algún tipo de modificación en esa materia y argumentan que para el caso del avalúo y liquidación de impuestos de los colegios, tanto públicos, como privados, sí hay beneficios. “Estos inmuebles dotacionales tienen un avalúo diferente a los predios residenciales, y así mismo tienen una tarifa especial para la liquidación del impuesto”, indicaron desde la Secretaría de Hacienda.

“Según Catastro Distrital, en los avalúos de predios dotacionales como colegios se reconoce que estos inmuebles no tienen una norma urbanística para desarrollarlos, y esto se refleja en menores valores. Y a la hora de liquidar el impuesto se calcula sobre una tarifa de 6,5 X 1.000, para el caso de los colegios privados y de 5 X 1.000, para los públicos”, argumenta el Distrito.

¿Qué cambios sobre el predial estudia el Concejo?

La Administración Distrital formalizó el pasado 14 de julio su propuesta de modificar la forma como se cobra el impuesto predial en Bogotá. El Distrito pretende que el gravamen se cobre a través de cuotas; que haya un techo al incremento anual y dejarlo, máximo, en 25 % y que el cobro a los propietarios de los predios tenga como base el avalúo catastral, y no el estrato. (Lea: La propuesta para cobrar un predial más justo en Bogotá)

Para concretar sus pretensiones, el alcalde Enrique Peñalosa radicó un proyecto de acuerdo en el Concejo de la ciudad, que se encuentra en sesiones extras para debatir además una solicitud del mandatario para que el Distrito se pueda endeudar en $5 billones para invertir, sobre todo, en vías y troncales de Transmilenio.

Sacar adelante estos dos proyectos significaría que Peñalosa, después del Plan de Desarrollo, consolidaría en buena parte la base económica de su ambicioso plan de obras en menos de un año de gobierno.

La Secretaría de Hacienda considera que, de aprobarse la modificación al cobro del predial, se garantizarán en buena medida los recursos que necesita la ciudad para la inversión en obras. Pero Peñalosa ya dejó claro en su Plan de Desarrollo que para cumplir su ambicioso plan de infraestructura recurrirá a recursos extraordinarios, como $5 billones de crédito.

Por Redacción Bogotá

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar