Los integrantes de una organización al margen de la ley, que atacaba a ciudadanos que transitaban en el centro de Bogotá para hurtarles sus pertenencias, deberán pagar 11 años y seis meses de prisión, tras ser hallados penalmente responsables.
Tras los videos y reconocimientos fotográficos expuestos por la Fiscalía como material probatorio, los procesados aceptaron los cargos de concierto para delinquir agravado y hurto calificado y agravado, por ejercer violencia sobre las personas en hechos ocurridos entre noviembre de 2015 y septiembre de 2016.
“Uno de ellos los marcaba, otros los seguían y luego eran cercados y, con violencia bajo amenazas con armas de fuego y armas blancas, le quitaban sus pertenencias”, narró la fiscal encargada de la investigación.
Los integrantes de la organización, que era dirigida por dos hermanos, “se comunicaban con señas, por ejemplo si el objetivo era una cadena de oro los campaneros se tocaban el cuello, si el botín era dinero se tocaban los bolsillos y si era el celular hacían señas en la oreja”.
“Tenían asolada a la comunidad por eso fueron cobijados con una medida de aseguramiento el 17 de septiembre de 2016”, sostuvo el juez de conocimiento luego de avalar el allanamiento a los cargos por parte de los procesados.
En su momento, la administración distrital aseguró que el seguimiento se realizó durante varios meses en San Victorino, el Parque de la Mariposa y la avenida Caracas. Fueron señalados de cometer al menos 500 hurtos y amenazaban a los comerciantes para que nos los denunciaran.
"Delinquían en un organigrama parecido al de una empresa, porque se asignaban funciones diariamente y sectores para ejercer los hechos delictivos", aseguró el comandante de la Poicía de Bogotá, general Hoover Penilla, en 2016, tras la captura de los integrantes.
Durante los primeros siete meses de 2017 se interpusieron 9.206 denuncias por robos con arma de fuego o arma blanca en Bogotá, según datos de la Policía.