Coronell denuncia que Peñalosa recibió donaciones de constructores de Proscenio

El columnista advirtió que el alcalde debió declararse impedido para darle vía libre al proyecto, ubicado en el barrio La Cabrera, pues las constructoras Amarilo y Arpro le hicieron donaciones e incluso, en uno de los predios donde se levantará la obra funcionó una de sus sedes de campaña.

Redacción Bogotá - Bogota@elespectador.com
17 de febrero de 2019 - 03:14 p. m.
Tras años de gestiones y estudios, así como el compromiso de realizar obras de mitigación, los constructores lograron que el 22 de noviembre la administración autorizara vía decreto cambios relacionados con la conectividad peatonal, el aumento del espacio público y la ampliación de vías, andenes y plazoletas públicas. / Cristian Garavito - El Espectador
Tras años de gestiones y estudios, así como el compromiso de realizar obras de mitigación, los constructores lograron que el 22 de noviembre la administración autorizara vía decreto cambios relacionados con la conectividad peatonal, el aumento del espacio público y la ampliación de vías, andenes y plazoletas públicas. / Cristian Garavito - El Espectador

“Lo cierto es que Proscenio hará más ricos a unos multimillonarios, acabará con un sector de Bogotá que había logrado conservarse y será otra de las pobres herencias que le dejará Enrique Peñalosa a Bogotá”. En estos términos, el columnista Daniel Coronell cuestionó este domingo a la administración distrital por darle vía libre al proyecto Proscenio, que propone intervenir un espacio de casi cinco veces el coliseo Movistar Arena y levantar viviendas, oficinas, comercio y hasta un teatro en el norte de la capital.

>>>En contexto: Proyecto Proscenio, ¿hay un punto de equilibrio?

En su columna en la revista Semana, Coronell advierte que el alcalde Peñalosa debió declararse impedido en el proyecto, pues denuncia que las dos constructoras detrás de la obra –Amarilo y Arpro, perteneciente a la familia Neme– fueron aportantes a su campaña para llegar al Palacio Liévano en 2016.

Incluso, señala que una de las sedes de campaña del ahora mandatario funcionó en un edificio ubicado dentro de la zona donde se levantará el proyecto, en el barrio La Cabrera. Indica también que la familia Neme tiene entre sus actividades la representación de Volvo en Colombia, incluyendo buses.

“Sin embargo, no encontré ningún documento que los vincule con negocios de vehículos para Transmilenio, incluyendo la reciente y polémica venta de buses de antepenúltima tecnología ya descontinuados en Europa por sus niveles de contaminación. Ese negocio fue ejecutado por Volvo de Brasil”, agrega.

Coronell manifestó que, con la modificación del plan parcial que hizo la actual administración, mejoró “el negocio de los constructores” y dijo que el plan de movilidad que avaló el Distrito en la zona, además de tener inconsistencias técnicas, subestima el impacto de la obra sobre el tráfico del sector.

“El tráfico de carros en uno de los cruces afectados, 86 con 11, fue estimado en 132 automóviles por hora por la administración cuando en realidad los vecinos contaron y probaron 564 carros por hora. Esa fue una de las varias cuentas chuecas que han servido para que la administración Peñalosa le diera vía libre e impulso al polémico proyecto”, precisa el columnista.

En respuesta, el alcalde Enrique Peñalosa salió en defensa del proyecto a través de su cuenta en Twitter e indicó que la obra generará más espacio público e infraestructura segura para peatones y ciclistas, libre de ruido y contaminación. Señaló que el nuevo decreto mejoró los equipamientos públicos y culturales “para el beneficio y disfrute” de los vecinos.

“Proscenio tiene un Plan Parcial aprobado desde el 2010 que está vigente y no tiene vencimiento. Petro lo mantuvo. Nuestra modificación lo que hizo fue, manteniendo los mismos metros cuadrados, exigir más espacio público (…) Seguiré haciendo lo correcto por la ciudad, así algunos poderosos y sus amigos abusen, hagan sugerencias calumniosas y demás. Cosecharán lo que siembran, tristemente para nuestra sociedad”, manifestó el mandatario.

Proscenio es un plan parcial de renovación urbana, ubicado estratégicamente en inmediaciones del parque El Virrey y la Zona Rosa, e implica demoler 260 predios, entre las calles 85 y 88 y las carreras 13 A y 15. De allí la disputa.

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Por Redacción Bogotá - Bogota@elespectador.com

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