La concejal Martha Ordóñez espera que el aumento de las cifras por delitos sexuales en menores de edad sea un llamado de alerta para la actual administración de la ciudad, y espera que se incluyan las acciones necesarias para prevenir, estimular la denuncia y atender a las víctimas de este flagelo en el próximo plan de desarrollo de Bogotá.
La cabildante considera que se deben fortalecer las herramientas y programas que actualmente existen y que muchas veces no son aprovechadas. “Por ejemplo, el Acuerdo que crea el Registro Único Distrital para casos de Violencia Sexual aún no ha podido ser implementado en la ciudad”.
Para Ordóñez, el aumento de las cifras, que en 2010 reportaban 3.397 casos y en 2011 pasaron a ser 3.783, también se debe relacionar con el aumento de las denuncias y que muchos bogotanos están entendiendo que frente a este delito no se puede guardar silencio.
“Aún estamos muy lejos de conocer las verdaderas dimensiones de esta problemática, si se tiene en cuenta que no se están denunciando un 70% de los casos según la Fiscalía o peor aún el 95% por ciento según el ICBF”, agregó.
En esta perspectiva, mencionó cómo la mayoría de los 500 casos que en promedio se presentan al año de niñas menores de 14 años embarazadas en Bogotá no son registrados como abuso sexual
“Son muchos los factores que determinan que este tipo de delitos no se denuncien, entre otras razones que el principal lugar de ocurrencia es la propia casa del menor y el victimario casi siempre es un familiar o persona conocida, esto sumado al hecho que para un niño o niña víctima no es fácil realizar una denuncia si no cuenta con en el apoyo de un adulto, como es el caso de niños entre los 0 y 5 años de edad, en este rango, según Medicina Legal, se presentaron 707 casos de abuso sexual en 2011”.