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Con Gustavo Petro fuera del Palacio Liévano, la mano del presidente Juan Manuel Santos se empieza a sentir en el gobierno distrital. En medio del temor del gabinete del exalcalde por la continuidad del plan de desarrollo “Bogotá Humana” y el anuncio del alcalde (e) Rafael Pardo de mantenerlo en marcha, finalmente se impusieron las directrices del primer mandatario, quien marcó la hoja de ruta para la actual administración encargada, mientras se elige nuevo alcalde del Distrito.
Movilidad, seguridad y vivienda fueron los temas principales de la reunión. En materia de movilidad, su importancia obedece al caos que se ha vivido durante las últimas semanas en el sistema Transmilenio a causa de los problemas financieros de algunos operadores y los retrasos en las obras del sistema, que para este año ya debería tener avances definidos en la construcción de las troncales por la avenida Boyacá y la carrera 68.
En cuanto al tema de seguridad, se dio respaldo a la intervención de los 75 barrios más inseguros de Bogotá, como lo había anunciado el alcalde (e) el fin de semana. Finalmente, la vivienda fue un tema particular, ya que el Gobierno ha considerado que los retrasos en la edificación de viviendas de interés social y prioritaria fue por la falta de acuerdos entre la saliente administración y el gobierno Santos. Sin embargo, ahora podrán pisar el acelerador con los planes previstos.
Germán Vargas Lleras, exministro y hoy fórmula vicepresidencial de Juan Manuel Santos, en entrevista ayer con El Espectador, señaló que el Gobierno impulsaría la construcción de la Avenida Longitudinal de Occidente (ALO); las obras de Transmilenio en la Boyacá y la carrera 68, así como terminar la calle 26 hasta El Dorado. Además, renovaría el compromiso de cofinanciar la primera línea del metro y pondría a andar los metrocables. Finalmente, destrabaría el asunto de vivienda.
El consejo de ministros, que avanzaba al cierre de esta edición, se convocó desde el pasado viernes, un día después de conocer que los secretarios del gabinete Petro sólo estarían en la administración hasta el 1° de abril. Ante la coyuntura, el propio presidente citó la reunión para “discutir exclusivamente el tema de Bogotá y ver qué medidas rápidas podemos tomar conjuntamente con el alcalde”, dijo el presidente.
Previo al consejo de ministros, el alcalde encargado pidió un balance a cada uno de los sectores de la administración distrital para conocer el avance del plan de desarrollo. Al final de las reuniones, la conclusión de Pardo fue clara: “El plan de desarrollo es bueno en el papel, pero le falta ejecución”. Con esta idea llegó ayer a la reunión con el presidente Santos y su gabinete. El encuentro comenzó a las 5:00 de la tarde y casi a las 6:30 de la tarde empezaron a hablar de Bogotá.
Gabinete a la sombra
Pese a que el saliente gabinete distrital pidió al Gobierno Nacional poder asistir al consejo para presentar la situación de los temas comunes, no fue invitado. Por esta razón los secretarios realizaron un consejo de gobierno, sin el exmandatario que los nombró ni el actual alcalde encargado.
A siete días de que se haga efectiva su renuncia, la ratificaron por tercera vez y calificaron de “ilegítimo” el mandato de Rafael Pardo Rueda. Además, expresaron su inconformidad por el consejo de ministros, que se celebró en la tarde de ayer en la Casa de Nariño, para hablar sobre el futuro de Bogotá sin ellos, que son los que conocen cómo va la ciudad. Por eso hicieron un pronunciamiento conjunto en el que resaltaron los avances del plan de desarrollo de Petro y señalar que la ciudad no está al garete y que contrario a lo dicho por el alcalde (e), “en la ciudad sí hay avances, gobierno y resultados”.
Una vez más, entre los funcionarios del gabinete Petro se mantienen dos corrientes: la de los directores de institutos, que se mantendrán en sus cargos, según ellos, para defender el plan de desarrollo del exalcalde. La otra es la de los secretarios, que señalaron que dejan la administración, al creer que detrás del nombramiento de Rafael Pardo como alcalde encargado hay un plan del presidente Santos para tomarse la administración.
Aclararon que una vez salgan de sus cargos, actuarán como un gabinete a la sombra y que estarán vigilantes para que “no se destruyan los programas del plan de desarrollo”. Además agregaron que sólo regresarán en caso de que Santos nombre a un alcalde encargado de la terna que presente el movimiento Progresistas.
Sin embargo, hay algunos que no creen que eso suceda. “Los secretarios insisten en que Santos va a alargar la permanencia de Pardo al frente de la Alcaldía, con el único propósito de poner en marcha sus programas, pasando por encima del plan de desarrollo “Bogotá Humana”. Consideran que el presidente no le hará caso a la terna que presente el partido y quién sabe qué ocurra con las elecciones atípicas”, dijo el director de Turismo, Luis Fernando Rosas, quien es uno de los que seguirán en la administración.
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