Tras el revés que acaba de sufrir la administración de Enrique Peñalosa en el Concejo de Bogotá, que ni siquiera sometió a votación su proyecto de valorización y lo archivó, este viernes el Distrito anunció que insistirá y presentará nuevamente la iniciativa. Eso sí, acogiendo las sugerencias y atendiendo los cuestionamientos que al final precipitaron el hundimiento del proyecto. (Lea: Valorización: primer revés de Peñalosa en el Concejo)
El propio alcalde lamentó a través de su cuenta en Twitter el trámite que tuvo la iniciativa en un Concejo que el año pasado le aprobó casi todas sus iniciativas sin mayor reparo, incluso algunas tan impopulares como la venta de la ETB, la reforma a la red pública de hospitales o las vigencias futuras para el metro elevado, que les valió una denuncia penal a varios concejales. (Lea: Nada salvó el proyecto de valorización de Peñalosa)
Al hundirse la valorización en el Concejo, millones de bogotanos se quedarán sin obras que les habrían hecho la vida más feliz
“Por instrucción del alcalde se va a volver a presentar el proyecto, obviamente con unas modificaciones. Este proyecto en un principio tenía contemplada la Troncal Séptima desde la 72 hacia el norte, decidió quitarse y estábamos listos para hacer nuevos cambios”, dijo el funcionario en diálogo con Blu Radio, precisando que se analiza si se vuelve a tramitar en sesiones extraordinarias.
“Vamos a analizar la situación y decidiremos si es pertinente presentarlo ya o esperar hasta agosto, cuando se instalan las sesiones ordinarias”, agregó.
Tras una sesión que se extendió por al menos 10 horas, marcada por desencuentros, recesos y sobresaltos, los concejales de la Comisión de Hacienda ni siquiera sometieron la nueva valorización a votación y fue archivada. “La iniciativa nació muerta. Especialmente al conocer todos los antecedentes con los proyectos de valorización incumplidos y el momento financiero que atraviesan los ciudadanos”. Así habló un concejal, quien dijo que por más esfuerzos que hizo el Distrito por salvar el proyecto de valorización, no lo logró. Ni siquiera pudo convencer a los concejales de Cambio Radical, que hasta ahora habían sido incondicionales con el alcalde Enrique Peñalosa.
Desde antes se sabía que, de los 15 concejales de la comisión, solo dos apoyaban el proyecto, seis estaban en contra y siete, indecisos. Varios funcionarios, encabezados por el secretario de Gobierno, llegaron al cabildo para justificar la importancia de la iniciativa y de esta manera tratar de convencer a los dudosos.
Casi al final de la tarde se declaró un receso para que las bancadas indecisas (Cambio Radical, Partido Liberal y La U) trataran de llegar a un consenso. En el caso de Cambio Radical, estaban pidiendo algunos ajustes como reducir algunos recursos para estudios y cobrar la valorización cuando las entregaran.
Entre los argumentos que influyeron para alertar a los concejales sobre el proyecto estuvieron los planteados por el contralor Juan Carlos Granados, quien les recordó que, en la última valorización del 2005, de las 140 obras planteadas solo se han ejecutado 41 a día de hoy, con la particularidad que se invirtieron recursos de esa contribución en estudios y diseños, así como en compra de predios de obras que después fueron excluidas. Teniendo este antecedente, el jefe del ente de control distrital fue uno de los primeros en sugerir que solo se debía cobrar valorización de proyectos con estudios completos, que permitieran una pronta ejecución.