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Si la semana que pasó fue difícil para Transmilenio, esta que empieza puede ser aún peor. Decenas de bloqueos, manifestaciones y hasta agresiones contra buses y estaciones del sistema fueron el pan de cada día para los usuarios, por cuenta de quienes se manifestaron en contra del aumento de $200 a la tarifa, dejándola así en $2.200, mientras que cada viaje en los buses del SITP aumentó $300, quedando en $2.000. La molestia entre los usuarios por el alza fue evidente, y mientras más se acercaba la fecha marcada en el calendario para que los ciudadanos hicieran una mayor inversión en sus transportes, mayor era la tensión en los articulados, las estaciones, pero, sobre todo, en las calles. Este lunes, primer día hábil de las nuevas tarifas, la historia no fue diferente, y varias movilizaciones volvieron a colapsar un sistema con un panorama cada vez más incierto. (LEA: Tarifa de Transmilenio, ¿un precio justo?)
Esta vez no fue el norte de la ciudad o la zona limítrofe con el municipio de Soacha, escenarios de las movilizaciones de la semana pasada, sino el centro de Bogotá. Cientos de personas -aproximadamente 1.000-, se aglomeraron en zonas claves como la Avenida Caracas con calle 19, la carrera Séptima con calle 26 o el sector de San Victorino, donde una vez más mostraron su inconformidad con el aumento en los pasajes. Arengas, carteles y puños en alto, fueron parte del paisaje céntrico dela ciudad, que en pocos minutos empezó a hacer mella en el flujo de los articulados de Transmilenio.
Entre 5:00 y 8:00 p.m., una de las franjas más complejas en la movilidad capitalina, se presentaron las manifestaciones, que obligaron a los buses a tomar desvíos y a los miembros del Esmad a acompañar las marchas para disolver de inmediato cualquier intento de bloqueo en las troncales. No fue suficiente, y muchos manifestantes lograron el que seguramente era su objetivo: volver a colapsar el sistema, presagiando una semana que posiblemente dará a la Alcaldía muchos dolores de cabeza si las protestas se vuelven recurrentes. Las troncales más afectadas fueron Caracas, Carrera 10, Eje Ambiental y Calle 26. También se registraron complicaciones en algunas estaciones de la troncal Suba, Calle 80 y Caracas Sur, además de los buses duales que transitan por la Carrera Séptima.
Las nuevas protestas no fueron solo por el Transmilenio a $2.200. Como si fuera poco el malestar por el aumento, miles de usuarios denunciaron que los transbordos, que según el Distrito iban a ser gratuitos, se seguían descontando de sus tarjetas sin saber a quién “reclamarle” esos $300. Es decir, un usuario que necesitó hacer transbordo de Transmilenio a SITP, hoy tuvo que pagar $2.500 en un solo trayecto, cuando se suponía que solo iba a pagar los $2.200 iniciales.
"Los transbordos en su mayoría son realizados por las personas de menores ingresos, quienes serán los principales beneficiarios: el 64 % de los viajes con transbordo es realizado por personas de estratos 1 y 2, y el 32 % por personas de estrato 3", había avisado la Secretaría de Movilidad cuando se anunció el aumento de las tarifas, pero solo fue hasta el pasado miércoles que Transmilenio indicó que únicamente la tarjeta personalizada, o fidelizada, permitía que los transbordos salieran a $0, y a $200 si el enlace era entre un bus y Transmilenio, por lo que muchos clientes que utilizan las tarjetas azules o rojas, o las de bancos y otras entidades, no sabían que debían adquirir la tarjeta TuLlave para obtener los beneficios.
Pese a esto, varios internautas que son usuarios del sistema inundaron las redes sociales de Transmilenio asegurando que, aun teniendo la tarjeta personalizada o fidelizada, les cobraron los $300 del transbordo. Todos los usuarios que se vieron afectados en este primer día oficial de las nuevas tarifas, deberán comunicarse con la línea 018000115510 o al 4823304, donde podrán presentar las quejas.