“EPS sí deben asumir el servicio de ambulancias”: Jaime Arias

Jaime Arias, presidente de Acemi. / El Espectador

Foto: El Espectador - David Campuzano

La decisión de la Secretaría de Salud de acabar el contrato que tenía con empresas privadas de ambulancias ha generado críticas y, de paso, desnudado las falencias del servicio en la ciudad. Mientras un grupo señala que la administración es la llamada a garantizar el servicio, sin importar dónde y cómo ocurran las emergencias, la Alcaldía sostiene que no seguirá asumiendo un gasto que deben cubrir las EPS.

“El Distrito tiene obligación de atender las emergencias: la gente que está en la calle, que ha sido atropellada por un carro, un herido en un incendio o una inundación, pero los traslados privados y desde entidades privadas no son nuestra obligación. No lo vamos a seguir pagando. Usted debe llamar a su EPS si tiene una emergencia”, explicó el secretario de Salud, Luis Gonzalo Morales.

En medio de la polémica, y cuando se creía que las EPS le harían el quite a la responsabilidad, ocurrió lo contrario: Acemi, el gremio de las empresas de salud, respaldó la iniciativa de la administración, que apunta a ponerle orden a la prestación de este servicio en la ciudad. Según Jaime Arias Ramírez, presidente de la asociación, el Distrito tiene la razón y las EPS son las llamadas a cubrir el servicio de sus afiliados. Eso sí, aclara, siempre que el traslado esté en el Plan Obligatorio de Salud (POS).

“Tradicionalmente, las EPS tienen que prestar el servicio cuando se trata de movilizar a un paciente de una institución a otra o de zonas rurales a zonas urbanas. Son las normas generales. Y aunque no tienen ambulancias, deben tener convenios con empresas que prestan el servicio. En el caso de las urgencias, las EPS tienen diferentes arreglos, y si el servicio lo presta un privado, por lo general pagan el servicio”.

Arias sostiene que el gremio de las EPS ha entablado un diálogo con el secretario de Salud para decirle que lo que haya que pagar, lo pagan. “Nunca se ha dejado de pagar el servicio, excepto en casos que no están en el POS. Me imagino que el año entrante, con el nuevo plan de beneficios, seguramente se mejorará la cobertura. Hay que tener las cosas claras. Lo importante es que la gente tenga el servicio. El secretario tiene razón. No todo lo debe asumir el Distrito”.

Sin embargo, Arias enfatizó que los ciudadanos y los afiliados deben hacer buen uso de este servicio, ya que no todo es una urgencia, ni todo amerita el traslado en ambulancia. “Hoy en día, más que ambulancias, las EPS tienen automóviles para atención domiciliaria y para trasladar a algunos pacientes de un lado a otro. No siempre se necesita una ambulancia”.

Insiste en que, a pesar de la disposición de las EPS, el tema de las ambulancias es más complejo de lo que parece. “Es caótico y vale recordar que el Distrito tiene una red grande, que cubre lo necesario. Sin embargo, gran parte de los traslados se requiere en accidentes de tránsito, y eso no lo cubre el Distrito ni las EPS. Para eso está el SOAT”.

Aunque el vocero reconoció que las EPS deben tener por obligación una línea de emergencia para atender las solicitudes de sus afiliados, señaló que no todas lo tienen. Por eso, si la empresa niega el servicio de ambulancia, el usuario debe quejarse ante la Superintendencia de Salud. “No estoy diciendo que todas cumplan. Si hay fallas, que las sancionen. Creo que el llamado es a que, en el futuro, las EPS presten el servicio adecuado, rápido y que todas tengan una línea de emergencia para que sus afiliados sepan a dónde llamar”.

Esta coyuntura, dice Arias, es la oportunidad para recordar que el servicio de ambulancias en Bogotá es caótico y no está bien regulado, por lo que mucha gente llama a la línea de emergencia del Distrito y no a una EPS. “El servicio de despacho de ambulancias lo debería coordinar esta línea. Esto no tiene que ver con el pago del servicio. Eso se puede arreglar después”.