Eterno suspenso en integración de tarjetas

/David Campuzano

Este miércoles en la mañana la firma Recaudo Bogotá, que tiene a su cargo el manejo de la tarjeta tullave para acceder a los buses del Sistema Integrado de Transporte Público (SITP), sorprendió a los ciudadanos anunciando que en agosto estará lista para iniciar la integración general con los otros medios de pago existentes: es decir, las tarjetas azules y rojas (Tarjeta Capital y Cliente Frecuente). La famosa unificación permitiría a los bogotanos moverse con cualquiera de estas tarjetas en los distintos buses sin tener que pagar doble pasaje en los trasbordos como hasta ahora ha pasado.

Sin embargo, el anuncio llamó la atención pues hace una semana el gerente de Transmilenio, Fernando Sanclemente, reconoció que el renombrado proceso de integración de las tarjetas no estaría listo en agosto y se extendería hasta final de año. Esto debido a otro capítulo de la pelea jurídica entre las empresas recaudadoras Angelcom y U T Fase II (encargadas de las fases I y II de las troncales de Transmilenio) y Recaudo Bogotá.

Entonces, ¿Cómo puede Recaudo asegurar que está lista para comenzar con la “integración general”? ¿A qué se refiere la firma con este anuncio? ¿Cuáles fueron las razones de Transmilenio para reconocer que la unificación no se daría en agosto?

Lo que Recaudo Bogotá aseguró este lunes es que la firma está preparada “para que a partir de agosto los usuarios del sistema en las estaciones de las troncales de la calle 26 y carrera 10 puedan leer y recargar las tarjetas azules y rojas así como la tarjeta Tullave”. Pero esto sólo sería parte de la integración de tarjetas, pues los torniquetes de las troncales de las fases I y II de Transmilenio (Caracas, Calle 80, avenida Suba, avenida Américas, NQS) seguirían sin leer la tarjeta Tullave.

De esta manera, la ciudad seguiría sin la verdadera integración de tarjetas. Recaudo Bogotá insiste en que la ausencia de solución en las fases I y II del sistema se debe a la falta de colaboración de la firma Angelcom, que no ha hecho los desarrollos correspondientes en su plataforma.

Se trata de otro capítulo de la guerra entre las firmas recaudadoras, que una vez más retrasó el proceso de integración, luego de que el Distrito por fin hubiera tomado una decisión al respecto. El pasado 30 de abril Transmilenio expidió la resolución 125, en la que adoptó unilateralmente la propuesta de integración del medio de pago presentada por Recaudo Bogotá y estableció tres meses y medio para la integración en el componente troncal, y un mes más para la flota de buses zonales del SITP. Luego de esa decisión, lo que esperaba la entidad era un alto grado de compromiso por parte de las firmas para implementar la solución.

Pese a esto, nuevamente la pelea legal de las firmas prevaleció y “las sociedades recaudadoras Angelcom S .A.; U T Fase II y Recaudo Bogotá S.A.S., interpusieron sendos recursos de reposición” contra la resolución 125. Este es el palo en la rueda para la integración de tarjetas que hoy urge en la ciudad, y que entre otras consecuencias, no permitirá que los ciudadanos se animen a tomar los buses del SITP aumentando su visiblemente escasa demanda.

Por su parte, Jorge Cabrera, gerente de Angelcom, señaló que lo que han puesto en conocimiento del Distrito son los incumplimientos contractuales de Recaudo, ya que ésta firma debió haberr implementado tarjetas compatibles con las existentes en el sistema.

Ahora Transmilenio está realizando el trámite de los distintos recursos de reposición para cumplir las normas legales al “garantizar el derecho de defensa y el debido proceso administrativo”. Mientras tanto, Sanclemente explicó que no se puede estar seguro de una fecha de integración.