Publicidad

Fundación Cerros de Bogotá pide no urbanizar reserva Van der Hammen

La organización ciudadana explica que el área tiene un potencial de restauración y recreación que mejoraría la calidad de vida de los bogotanos.

Redacción Bogotá
05 de marzo de 2016 - 02:45 a. m.

La fundación Cerros de Bogotá afirma que la Reserva Thomas van der Hammen es vital para la conectividad ecológica regional y no debe ser modificada ni realinderada Así lo explicó Henry Garay, director de la organización.

En un comunicado, la organización ciudadana explica que, la zona tiene un potencial de restauración y recreación, que “mejoraría significativamente” la calidad de vida de los bogotanos aunque no garantice que el proceso de conurbación de Bogotá se detenga. Con esta afirmación la fundación se unió a uno de los debates más álgidos que se está dando en la capital.

La discusión sobre si urbanizar o no parte de la reserva inició cuando el alcalde Enrique Peñalosa anunció que pretende habilitar 15.000 hectáreas de suelo en el perímetro urbano, con el fin de adelantar el plan Ciudad Paz, con el impulsarán tres proyectos: uno en el sur, que incluye expansión hacia Soacha y Mosquera; otro en el occidente, denominado Ciudad Río, cerca de la franja del río Bogotá, y Ciudad Norte. Este último (para un millón de personas) pretende urbanizar al menos 5.000 hectáreas, de las cuales un porcentaje estaría en terrenos de la zona de conservación.

Para Peñalosa, casi toda la reserva “no tiene foresta, sino potreros con vacas, que pertenecen a privados”. Por eso ha advertido sobre el grave costo ambiental de impedir una “urbanización bien hecha”. Su concepto lo respalda con las cifras del plan de manejo de la reserva, que indican que apenas el 7,8% son ecosistemas de conservación, mientras que el 92,2% lo ocupan áreas deportivas, colegios, industrias, rellenos de escombros, casas, establecimientos comerciales, estaciones de servicio y, en su gran mayoría, áreas agropecuarias.

Frente a la postura del Distrito, algunos ambientalistas resaltan que el valor de la estructura ecológica de la zona no depende de la cantidad de árboles nativos, la vegetación o la biodiversidad, sino en la interacción entre aguas lluvias y manantiales subterráneos.

En los próximos meses la junta directiva de la CAR deberá decidir si urbanizar o no parte de la reserva.

Por Redacción Bogotá

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar