IDU revela algunos detalles de la revitalización de la carrera Séptima

Según el IDU, el corredor hoy está en declive, desconectado del sistema de movilidad de la ciudad, con un espacio público en franco deterioro, excluyente y caótico. / Archivo

En estos momentos, el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) adelanta los estudios para revitalizar el espacio público, ordenar el tráfico e integrar el transporte masivo de la carrera Séptima, desde la calle 32 hasta la calle 200. Sin embargo, esta mañana la entidad reveló algunos detalles de los efectos que podrá traer su proyecto. (Lea: Así se imaginan los ciudadanos el Transmilenio por la Séptima)

En materia de movilidad, aseguró que el sistema Transmilenio por la carrera Séptima, que se extenderá 20 kilómetros, tendrá 21 estaciones y un Patio Portal. También contará con una conexión por la calle 72 con la troncal Caracas.

Según el IDU, se movilizarán 26.000 pasajeros hora sentido en 150 buses modernos y amigables con el medio ambiente. La velocidad promedio será de 23 km por hora, lo que permitirá recorrer en 50 minutos el tramo. “Serán 10 veces menos buses que movilizarán casi el doble de pasajero”, agregó la directora.

De acuerdo con el estudio, la carrera Séptima se conectará las troncales 10, 26 y Caracas y a futuro con la 68 y la primera línea del Metro. Con su ejecución, se contribuye con una reducción del 14% en la demanda de la troncal Caracas de Transmilenio.  

En el cuidado ambiental, el IDU reveló que la consultoría contratada incluye un estudio de monitoreo ambiental sobre todo el corredor, “el cual se realiza con 12 estaciones que miden las condiciones del aire, 16 los niveles de ruido y 8 la calidad del agua”.

En la intervención del espacio público se tiene presupuestado intervenir 420.000 metros cuadrado. Se contará la red de ciclorrutas de la ciudad con 10 kilómetros nuevos para los ciclistas. Además, se reconstruirán todos los andenes “para que sean incluyentes, para que puedan circular personas en condición de discapacidad, ciudadanos de la tercera edad, niños”. (Lea: El Transmilenio que dejaría Peñalosa)

Incluso, se tiene presupuestado mejorar los índices de seguridad al volverlo un corredor más iluminado, con mobiliario urbano, con cámaras de videovigilancia y con espacios aprovechados por la ciudadanía.  

Ante el rechazo de algunos ciudadanos del sector, Mantilla aseguró que se dbe analizar el proyecto, dejando de lado el debate político que lo ha permeado. Para el IDU este proyecto es clave porque beneficiará a 693.000 habitantes de las localidades de Chapinero, Santafe y Usaquén. En noviembre se conocerán en detalle los resultados.

Así va el proyecto

En diciembre del año pasado, la firma Ingetec S.A. Ingenieros Consultores fue seleccionada, mediante un concurso de méritos abiertos, para elaborar los estudios y diseños para la construcción de Transmilenio por la carrera Séptima, entre las calles 32 y 200.  El costo del contrato fue de $10.800 millones y se espera que los resultados estén listos, a más tardar, en noviembre de este año.

Transmilenio por la carrera Séptima es una de las apuestas del alcalde Enrique Peñalosa, incluidas en su plan de desarrollo. Aunque la troncal se propuso desde el mismo momento en que nació el sistema de transporte, los primeros estudios se hicieron en 2007, durante la administración de Luis Eduardo Garzón. Desde entonces la obra ha generado rechazo en algunos sectores, como habitantes de la Séptima y políticos. Incluso, en su momento suspendieron el proyecto tras conocer un estudio de la Universidad Santo Tomás que concluyó que una troncal no tendría cabida por esta vía.

A pesar de esto, Alexandra Rojas, gerente de Transmilenio, defendió su propuesta, argumentando que es una de las principales vías conectoras con el centro de la ciudad. Desde que Peñalosa inició su gestión, indicó que Bogotá contaría al final de su mandato hasta con ocho nuevas troncales del sistema. La Séptima, que sería la primera, avanza con paso firme.