Incendios no cesan en la región

Durante 10 días se propagó el incendio forestal en Cota. / Luis Ángel

El miércoles a las 10:00 de la mañana, algunos bomberos, la Defensa Civil y varios campesinos lograron apagar un incendio que se había propagado desde el día anterior en el municipio de Gachetá. Un humo asfixiante, cenizas por doquier y 10 hectáreas quemadas fueron el saldo del más reciente incendio que se ha registrado en Cundinamarca. Con este, ya son 63 los incendios ocurridos en Cundinamarca en lo que va del año por cuenta de la temporada seca.

De acuerdo con la Unidad de Gestión del Riesgo de Cundinamarca, en menos de un mes las llamas han afectado 331 hectáreas en 39 municipios de la región. El incendio de Cota, que duró 10 días y consumió 77 hectáreas, ha sido el más grave hasta ahora, seguido por uno similar ocurrido los primeros días del mes en el municipio de Nilo y que quemó 70 hectáreas.

Datos de la Gobernación de Cundinamarca señalan que 23 municipios continúan en alerta roja y 19 más en alerta naranja por la probabilidad de que se presenten incendios en sus territorios.

El panorama es preocupante: por un lado, los pronósticos del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) señalan que la temporada seca irá hasta marzo, lo que significa dos meses más de riesgo para estos pueblos, que difícilmente cuentan con un grupo de Defensa Civil que atienda los incendios. Tal como lo reveló este diario en 2012, aún siguen faltando bomberos en la mayoría de municipios de la región.

Además, la única amenaza no es el fuego: 26 municipios están en alerta roja por desabastecimiento de agua y en este momento muchos dependen de los carrotanques de las Empresas Públicas de Cundinamarca para suministrar el líquido a la población. La situación más crítica la viven Útica, Caparrapí, La Palma, Guaduas, La Peña, Quebradanegra, Villeta, San Juan de Rioseco, Jerusan y Apulo.

Ante la evidente amenaza, el mensaje insistente de la Unidad de Gestión del Riesgo es evitar a toda costa cualquier tipo de quemas y avisar a las autoridades cuando se registre un incendio, sin importar sus proporciones.