Con el fin de reducir el consumo de alcohol, marihuana y otras drogas, jóvenes de colegios de Bogotá diseñaron una estrategia para enfrentar esta problemática. Los estudiantes aseguran que la adicción de sustancias psicoactivas nace por la falta de diálogo con sus padres, quienes no los previenen a tiempo de este tipo de alucinógenos y prefieren evitar estos temas de conversación.
Esta estrategia, que se está desarrollando de manera simultánea en las ciudades de Bogotá y Tunja, tendrá como resultado una cartilla que será el fruto de las estrategias publicitarias de jóvenes para jóvenes enfocadas a reducir el consumo.
Valentina, una estudiante de grado once de un colegio privado de la localidad de Antonio Nariño, asegura que “muchos de los problemas que tienen los jóvenes hoy en día con el alcohol y las drogas no provienen de la calle sino de la falta de diálogo que existe entre los jóvenes y sus padres”.
Según la estudiante, siempre ha hablado abiertamente con sus papás acerca de drogas, alcohol, sexo y muchos otros temas, y esto la ha ayudado a sortear con responsabilidad estas cuestiones.
Como Valentina, 40 estudiantes de colegios oficiales y privados de la localidad Antonio Nariño trabajan en un programa para crear, desde su visión de jóvenes, una estrategia publicitaria para reducir de manera significativa el consumo de alcohol y marihuana. Esta iniciativa nace desde el Ministerio de Protección Social, la Organización Panamericana de la Salud, con la ejecución de la Corporación Acción Técnica Social.
Este proyecto responde al último estudio nacional de consumo de sustancias psicoactivas en la Población Escolar de Colombia, que muestra que el abuso de alcohol y marihuana se ha disparado en la población juvenil. Según este estudio, antes de los doce años, de cada tres estudiantes, dos ya han consumido alcohol, y 178 mil alumnos aseguran haber consumido marihuana.
Para el coordinador del programa, Julián Andrés Quintero, las estrategias que tratan de prevenir el consumo de drogas y alcohol, no deben construirse desde los escritorios, ni desde las agencias de publicidad; las estrategias deben diseñarse con los jóvenes para responder acertadamente a esta problemática.