A partir de este lunes, más de 5.000 buses tradicionales deben ajustarse al esquema del Sistema Integrado de Transporte en Bogotá, lo que significa en pocas palabras que se mantienen estas rutas pero los buses solo podrán recoger y dejar pasajeros en los paraderos establecidos para las rutas del SITP.
Desde este 1 de junio Transmilenio asumirá efectivamente el control de los buses viejos, pero sólo en el papel. Se trata de un ajuste jurídico que los ciudadanos no notarán ni afectará su dinámica, ya que seguirán viendo los mismos buses cubriendo sus rutas tradicionales.
El Distrito busca que estos vehículos - estarán señalizados con las normas de imagen dispuestas por TMSA-SITP: un código de identificación y el logo del SITP - lleguen a donde no llega el SITP o lo hace con dificultades, como en el sur de la ciudad en Ciudad Bolívar, San Cristóbal, Usme o en el occidente de la ciudad como Fontibón. (Lea: SITP, nada nuevo)
Además los usuarios de buses tradicionales no se verán perjudicados aún si no tienen la tarjeta Tu Llave, debido a que estas rutas seguirán operando con normalidad y recibiendo dinero en efectivo.
Solo hasta noviembre estos buses tradicionales saldrán de las calles de Bogotá luego de ser chatarrizados.