:format(jpeg)/www.elespectador.comhttp://thumbor-prod-us-east-1.photo.aws.arc.pub/Ww2fFcEgCYoyA9RIV1wd5LKSZHg=/arc-anglerfish-arc2-prod-elespectador/public/TYAQVIAQ7FDSTJ7DFFFX2AAX2M.jpg)
Un dramático caso escandalizó esta semana a los médicos del Hospital El Tunal, que el pasado martes recibieron sin actividad cerebral a una niña de apenas tres meses, víctima de un presunto abuso sexual.
La menor murió al día siguiente por la tarde y hoy viernes su madre, una menor también de 15 años, y su hermano de un año, se encuentran bajo la custodia del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), mientras la Fiscalía adelanta la respectiva investigación.
La historia comienza cuando, alrededor de las 7:30 p.m. del pasado lunes, Angie Paola Correa llegó a su casa en el barrio Juan Rey, en la localidad de San Cristóbal, donde encontró a su bebé con rastros de vómito. Luego solicitó la ayuda de un agente de un CAI cercano, con quien trasladó a la niña al CAMI de Altamira. Posteriormente ésta fue trasladada al Hospital El Tunal.
Esta es la versión de los hechos que señaló el doctor Santiago Barreto, subgerente científico del Hospital El Tunal. Asegura que la bebé ingresó con huellas de violencia como pequeñas fisuras en la zona genital y anal.
Después de la muerte de la menor, la madre recibió atención médica y psicológica, debido al impacto por el fallecimiento de su hija.
El doctor Barreto aseguró que el otro hijo de la mujer al parecer también fue víctima de abuso sexual en otro momento. “La madre es proveniente del municipio La Dorada, en Caldas, y se sabe que decidió irse de su casa debido a problemas de maltrato familiar”, agregó Barreto.
En 2011 hay registros muy diferentes sobre la violencia sexual contra menores de edad en la capital: de acuerdo con Medicina Legal, se presentaron 3.783 casos, la Secretaría de Salud reporta 2.548, las comisarías de familia 1.870 y el ICBF 1.312.