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Peñalosa y su giro independiente

El candidato verde está vinculando a su equipo de campaña a figuras alejadas de la dicotomía izquierda-derecha. El exalcalde de Medellín Alonso Salazar, cerca de ser el jefe de debate.

Camilo Segura Álvarez
02 de abril de 2014 - 03:36 a. m.
 Enrique Peñalosa, candidato presidencial,  con sus más cercanos colaboradores.  / AFP
Enrique Peñalosa, candidato presidencial, con sus más cercanos colaboradores. / AFP
Foto: AFP - Felipe CAICEDO

Al tiempo que el candidato Enrique Peñalosa hace proselitismo por las regiones, sus asesores más cercanos van conformando un ejército que cubrirá dos flancos estratégicos para hacer viable la candidatura presidencial de la Alianza Verde: el diseño de un programa de gobierno consistente y los argumentos de debate suficientes para darle consistencia política a una candidatura que pretende alejarse de las costumbres electorales.

Cuando comenzó la campaña para la consulta interna de los verdes, Peñalosa era señalado por algunos de sus copartidarios de ser un ‘caballo de Troya’ de Álvaro Uribe en sus filas. No olvidaban que, en la campaña para la Alcaldía de Bogotá de 2011, el hoy candidato presidencial recibió el apoyo del expresidente. Sus críticos decían que Uribe simbolizaba el “todo vale” al que se opusieron en 2010 cuando, con Antanas Mockus, estuvieron cerca de llegar a la máxima magistratura.

Una vez el hoy candidato presidencial ganó la consulta, con cerca de dos millones de votos, las dudas sobre la posible vinculación del candidato verde con el proyecto uribista no pararon. Incluso, Claudia López, la senadora electa, le reclamaba a Peñalosa que diera muestras ciertas de que había cortado relaciones con Uribe. Y lo hizo, precisamente, al nombrar a López como coordinadora programática de su campaña.

López ha sido la piedra en el zapato para buena parte de la clase política. Con investigaciones como la que terminó desentrañando las alianzas de políticos con grupos paramilitares para copar las instituciones democráticas, la investigadora y hoy senadora electa demostró que una buena porción de la coalición de gobierno que tuvo Uribe durante sus dos períodos presidenciales estaba vinculada con la ilegalidad. En otras palabras, López, por cuenta de sus investigaciones, terminó siendo una de las más visibles opositoras del expresidente.

Ahora López tiene el reto de hacer que el gesto, y más que eso el programa de gobierno verde, demuestre la independencia de esa candidatura. Por eso se reunirá con Camilo Romero y John Sudarsky, los precandidatos que perdieron en la consulta , para hacer ajustes a las propuestas que Peñalosa empieza a promover por el país.

“Me parece positivo su nombramiento. Es una señal clara al presidente Uribe de que la candidatura verde no está totalmente entregada. Claudia es una persona con las capacidades de hacer una buena síntesis de políticas públicas y atacar los vacíos que pueda haber en el programa”, dijo Sudarsky quien, una vez derrotado, había negado su apoyo a Peñalosa. “Mi relación con él va a ser alrededor de un pacto programático que, estoy seguro, podremos construir con la coordinadora”, añadió.

La otra novedad en la campaña verde está en los diálogos que el mismo Peñalosa viene adelantando con Alonso Salazar, exalcalde de Medellín destituido e inhabilitado por la Procuraduría y a quien recientemente el Consejo de Estado le devolvió sus derechos políticos. Salazar es muy cercano al gobernador de Antioquia, Sergio Fajardo, e incluso hizo parte de Compromiso Ciudadano, el movimiento que se opuso durante la década pasada al uribismo en Antioquia.

Según fuentes de la campaña de Peñalosa, Salazar llegaría a ser el jefe de debate. El encargo que tendría sería compaginar las propuestas de personajes como el concejal de Bogotá Antonio Sanguino, el senador Jorge Londoño y el exalcalde de Cali Jorge Iván Ospina, para darle robustez política a una candidatura que pretende alejarse de la política tradicional. La meta es que la imagen de gran ejecutor y de conocimientos técnicos que lleva Peñalosa sea acompañada de la capacidad de discurso público que le ha faltado en otras contiendas electorales.

Estos giros que viene dando la candidatura verde, según el portal Las 2 Orillas, no han pasado desapercibidos en la campaña reeleccionista del presidente Juan Manuel Santos. De acuerdo con versiones publicadas por ese medio, en las toldas presidenciales hay un equipo de colaboradores buscando vinculaciones de Enrique Peñalosa con escándalos o contratos mal celebrados durante su alcaldía en Bogotá o como gerente del Centro de Investigación de las Corporaciones de Ahorro y Vivienda.

Las últimas encuestas le han dado un lugar preeminente a Peñalosa para competir en la segunda vuelta con el presidente. Con estos movimientos, los verdes pretenden consolidarse como una opción independiente con aspiraciones serias de poder. Aunque algunos no descartan que con el paso del tiempo el discurso del exalcalde de Bogotá gire un poco hacia la derecha o la izquierda, su gran reto, y así lo reconocen, es derrotar maquinarias mediante un voto informado y de opinión del que López y Salazar son representantes.

@CamiloSeguraA

Por Camilo Segura Álvarez

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