No hay una masacre laboral. El Distrito planea ampliar los contratos de planta en muchas entidades y continuar con la no renovación de los contratos cuyas funciones no sean necesarias.
Ese es el mensaje del alcalde Gustavo Petro, para los sindicatos, concejales y líderes nacionales como el ministro de Trabajo, Rafael Pardo y la exalcaldesa Clara López, quienes en las últimas semanas lo han denunciado y criticado por la manera en la que se ha negado a renovar cientos de contratos por prestación de servicios en la burocracia distrital.
Los sindicatos y algunos concejales lo han acusado de cometer una “masacre laboral”; Clara López, hoy presidenta del Polo Democrático, de perseguir a quienes estaban en su administración, y Rafael Pardo, de tomar estas decisiones a la ligera, sin considerar un plan estructurado de formalización laboral en el Distrito.
Pero en entrevista con El Espectador, el alcalde por primera vez le responde a sus críticos sobre la materia y niega que en la alcaldía se esté despidiendo al personal.
“Desde el 2007 a la fecha, la planta del Distrito pasó de 20 mil contratos de prestación de servicio (OPS) a 32 mil, con un pico muy alto en las épocas de garantías electorales y en unas áreas donde las garantías electorales no actúan, por ejemplo en salud”, asegura el mandatario local. “Uno observa que la contratación se dispara exponencialmente pero los servicios no, entonces, uno se pregunta: esos contratistas ¿para qué son?”, añade.
Según el alcalde, los jefes de cada entidad han venido determinando qué contratistas ya no cumplían una función dentro de las respectivas instituciones. A partir de este análisis, en lo que va corrido del año el Distrito ha dejado de renovar de 3.000 a 4.000 contratos por OPS.
“Nada nos obliga a prorrogarlos, es un contrato civil entre dos que fue pactado y estableció una fecha de finalización”, asegura.
Petro reveló que el Servicio Civil del Distrito adelante actualmente un estudio de cargas, con el fin de determinar objetivamente en qué está cada entidad del Distrito. “Vamos a salir de muchos contratistas”, anunció el Alcalde. Pero “van a entrar otras personas empleadas, como personal especializado en áreas como de salud y educación”.
Actualmente el 60% de los más de 62 mil burócratas del Distrito están vinculados por medio de contratos de OPS. Según el Alcalde, el objetivo de la administración es formalizar el mayor número de plantas que cumplan funciones misionales dentro del Distrito. “Es una apuesta arriesgada porque eso tiene sus demoras pero es la decisión que nosotros tomamos”.