Son más de mil los maestros amenazados en el país: Defensoría

Alarmada se declaró la comunidad educativa de un colegio en el sur de Bogotá, donde un estudiante de 13 años atacó con un arma blanca a su profesor.

El hecho se presentó el pasado viernes, cuando un estudiante de grado octavo agredió en cinco oportunidades a un educador delante de sus compañeros y en pleno salón de clase.

Aunque la familia del menor rechazó el hecho y ofreció disculpas por la agresión, el padre del joven explicó que su hijo atacó al profesor debido a presiones del mismo docente, quien constantemente, asegura el padre, amenazaba al menor diciéndole que iba a perder el año.

Sin negar el bajo rendimiento académico de su hijo, ni justificando su actuar, el padre del estudiante indicó que el profesor trató de manera despectiva a su hijo y se rehusó a dictarle clase, razón por la cual el joven lo atacó.

En ese sentido, señaló que su hijo no es un delincuente y que buscará ayuda psicológica para el menor y toda la familia, ya que se trata de un hecho que los llena de vergüenza. Aunque el estudiante no será judicializado por ser menor de edad, su familia deberá asistir todos los gastos del docente y acudir a Bienestar Familiar.

Entretanto, el profesor agredido –un docente de la asignatura informática– explicó el modo como el estudiante lo atacó y rechazó lo ocurrido: “sentí un chuzón en la espalda, entonces yo reaccioné y venía con otro segundo. Entonces me paré, el muchacho se me hizo en frente y me dijo: ‘ahora sí se va a morir’”, manifestó el educador a Noticias Caracol.

Se estima que no es el primer caso de violencia que se registra en el centro educativo, ya que en la última semana seis educadores han tenido que pedir traslado de la institución ante frecuentes amenazas e intimidaciones.

Las agresiones hicieron que los docentes adelantaran una manifestación este lunes en las instalaciones del plantel, en la que pidieron mayor seguridad y denunciaron los riesgos a los que se enfrentan.

“En el colegio hemos tenido amenazas por internet, sobre todo por correo electrónico. Constantemente hay peleas sobre todo por las barras, se ubican acá al frente del colegio y los docentes tienen que salir a las siete u ocho de la noche hasta que la pelea se acaba”, indicó el docente Javier Andrés Moreno.

De acuerdo con cifras de la Secretaría de Educación de Bogotá, en lo corrido del año 64 profesores han solicitado traslado a otros colegios por intimidaciones, mientras que en 2013 –según datos de la Defensoría del Pueblo– 1.119 maestros a nivel nacional se declararon amenazados.

Las agresiones más frecuentes son protagonizadas por estudiantes, pandillas juveniles, padres de familia y en zonas rurales, grupos alzados en armas, por lo que los profesores pidieron que las familias asuman su responsabilidad en la educación y que las autoridades adopten medidas para enfrentar temáticas como el acoso, el microtráfico y el porte de armas entre menores.

“Nos preocupa el tema de drogas cerca a los colegios y el tema de pandillas, esos dos temas llevan a que haya una circulación de armas muy alta”, precisó Ariel Ávila, asesor de convivencia de la Secretaría de Educación.

Según la Secretaría de Educación, 136 colegios de la ciudad están ubicados en cercanías a las denominadas ‘ollas’, lo que favorece la criminalidad, incrementa la violencia y el porte de armas de los estudiantes.