S&P mantiene calificación a Bogotá pese a entorno político

Pese a la inestabilidad política por la que atraviesa el Distrito provocada por el proceso de destitución contra su alcalde, Gustavo Petro, Bogotá podrá mantener la solidez mostrada hasta el momento en el manejo de sus finanzas, dice la calificadora Standard & Poor’s.

Destaca el informe que el nivel de endeudamiento de Bogotá se mantiene bajo y su desempeño presupuestal es fuerte y estable, lo mismo que su posición de liquidez es sólida y estimamos que su administración financiera no se vería afectada en el corto plazo por la inestabilidad política por la que atraviesa el Distrito.

La calificadora indicó que espera que el Distrito mantenga un desempeño presupuestal fuerte, una posición de liquidez sólida y bajos niveles de endeudamiento al cierre de este año y en 2014, aún ante la inestabilidad política actual.

Destaca el informe de prensa que "esperamos que el Distrito continúe generando superávits operativos y después de gasto de inversión al cierre de este año y en 2014; que su posición de liquidez se mantenga sólida con respecto a sus obligaciones financieras de corto plazo y que su deuda siga en niveles bajos".

Aunque Standard & Poor’s desestima un efecto negativo inmediato en la calidad crediticia del Distrito por el actual entorno político, "consideramos que la inestabilidad política recurrente podría dañar su planeación financiera de mediano y largo plazo".

Al finalizar septiembre de este año, Bogotá mantuvo un fuerte desempeño presupuestal con superávits después de gasto de inversión de 2,1 billones de pesos, equivalente a 26% de sus ingresos totales, lo cual se compara positivamente con el 21% que alcanzó en septiembre de 2012.

Estos resultados son producto del incremento consistente en los ingresos del Distrito, especialmente en materia de impuestos, así como de un adecuado control de sus gastos operativos, remarca el informe.

Bogotá continuaría alcanzando superávits después de gasto de inversión superiores al 5% de sus ingresos totales, en línea con el 7% promedio de los dos años anteriores, aunque podrían reducirse a partir de 2014 ante su mayor inversión planeada, es el escenario que pinta la calificadora para este 2013.

La administración capitalina no enfrenta pasivos contingentes de consideración. Sus principales organismos públicos independientes, que incluyen a la Empresa de Energía de Bogotá,  Acueducto de Bogotá, la Empresa de Telecomunicaciones de Bogotá, son autosustentables, por lo cual considera que requieran apoyo extraordinario por parte del Distrito en el futuro cercano.

Explica la firma calificadora que a pesar de la inestabilidad política por la que atraviesa actualmente Bogotá, sería capaz de mantener un fuerte desempeño presupuestal, montos de endeudamiento moderado y una sólida posición de liquidez al cierre de este año y en 2014.