El Magazín Cultural

De la metáfora a la contradicción

Por iniciativa del Instituto Distrital de las Artes (Idartes), Lila Downs presenta en Colombia su disco ‘Pecados y milagros’.

Juan Carlos Piedrahíta B.
05 de junio de 2012 - 10:50 p. m.

La crisis es la vía directa para conectarse con las emociones. El miedo provoca en el arte manifestaciones mucho más verdaderas y más emblemáticas comparadas con las que surgen durante los tiempos de calma. Eso es, por lo menos, lo que piensa la artista mexicana Lila Downs, quien cree que en los momentos de represiones políticas, sociales y hasta económicas, es necesario conservar la calma y recurrir a la inteligencia para sortear los filtros y decir todo lo que se tiene en mente.

Ella, por ejemplo, emplea la metáfora como recurso vital dentro de sus interpretaciones artísticas, en las que mezcla los elementos tradicionales de su natal Oaxaca, la tierra de los alebrijes (artesanías contemporáneas hechas en madera) y de innumerables expresiones folclóricas, con estilos sonoros más universales, como el jazz, el blues y el rock.

Esa amalgama tan particular le ha otorgado un reconocimiento especial en varias latitudes. Sin embargo, esa exposición tan recurrente de su figura en los medios masivos de comunicación la lleva de inmediato a una contradicción, porque Lila Downs comenzó siendo una artista para gustos exclusivos, casi subterráneos, y de un momento a otro es una estrella que incluso ha tenido participaciones en películas de factura de Hollywood.

“Conmigo misma no convive muy bien la idea de ser una artista del denominado mainstream. Pero los seres humanos estamos llenos de contradicciones y me encanta saber que crece lo que hago, aunque creo que hay que buscar el balance para no perderme en el ritmo acelerado de lo que significa estar del lado del gusto masivo”, comenta la cantante y compositora, que debutó en el mercado discográfico con el álbum La sandunga, en 1999.

Desde entonces ha publicado, casi con religiosidad, producciones musicales de relativo éxito, que le han otorgado el beneficio de atravesar las fronteras de su país. Árbol de la vida, La cantina y Ojo de culebra han sido los de mayor difusión y con ellos ha logrado explorar no sólo las armonías y los estilos musicales de sus ancestros, sino que ha empleado la combinación de distintos lenguajes.

“Mezclar el inglés, el español y algunas lenguas de antaño mexicanas, ha sido una labor bastante compleja para mí. He tenido profesores que me han ayudado con la pronunciación y con la semántica para que las palabras no pierdan su contundencia luego de la traducción. Ha sido casi una misión antropológica”, dice Downs, quien está en Colombia para presentar su nuevo disco Pecados y milagros, en el que deja a un lado el jazz y el rock para concentrarse en el folclor.

Con más de quince años de experiencia sobre los escenarios, la mexicana ha aprendido a exponer y expresar la emotividad del lugar de donde viene. A ella le gusta exhibir la amplitud del bagaje que tienen los latinos para realizar sus muestras folclóricas y es una fiel defensora del oficio de dar a conocer lo autóctono sin tapujos. Eso es lo que más la emociona, lo que más la mueve.

“Cuando yo era pequeña y cantaba la música clásica, mi mamá me decía: ‘pues está muy bonito, niña, pero no tiene alma’, y esa ha sido la mejor crítica que me han hecho. Por eso, a mí me gusta que el público se vaya con algo de mí, que la gente sea transformada”, comenta emocionada Lila Down, quien acaba de tener un hijo y ese hecho, dice, le ha cambiado la óptica. Ahora es mucho más sensible y agradecida con el entorno, porque sabe que de ahí viene todo lo que la motiva a continuar. En la atmósfera encuentra la metáfora precisa para salirle al corte a lo situación compleja que vive su país, y de ahí también toma el alimento para recargar fuerzas, para vestirse de colores, exponer sus contradicciones y sentirse, cantando en inglés, en español o en lenguas autóctonas, la más mexicana de todas.

Lila Downs y la Misteriosa en Colombia. Jueves 7 de junio, 8 p.m. Teatro Jorge Eliécer Gaitán. Carrera 7ª Nº 22-47. Informes y boletería: 593 6300 y www.tuboleta.com.

Por Juan Carlos Piedrahíta B.

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