Memo Morales se apropió de las interpretaciones con aire español de la orquesta Billo’s Caracas Boys. Canciones como “El tunante”, “Rumores” y “Gitana” hicieron que su voz se inmortalizara en América Latina y por eso no es gratuito que su seudónimo de “El Gitano Maracucho” sea mucho más reconocido en la actualidad que su nombre de pila, Guillermo Enrique Morales Portillo.
Billo Frómeta, director y fundador de la agrupación venezolana, supo de la existencia de Memo Morales porque el cantante ya tenía una trayectoria consolidada con la orquesta de Luis Alfonso Larraín, y aunque ya había figurado en otros colectivos, como el de Garrido y sus Solistas, sus cualidades interpretativas a finales de la década del 50 ya eran comentadas en el ámbito nacional.
En 1964, Morales firmó su contrato con la Billo’s Caracas Boys y quedó establecido desde un principio que su fuerte estaría centrado en aquellas canciones ligadas con España. De esta manera, además, el nuevo integrante respetaría las especialidades de sus compañeros de tarima de ese entonces, Cheo García, mejor conocido como “El Guarachero de América”; y José Luis Rodríguez (“El Puma”), quien antes de dedicarse a la balada cantaba música tropical.
Gracias a la interpretación de Memo Morales se popularizaron temas como “Ni se compra ni se vende”, “Que viva España” y “Se necesitan dos”, el debut en la composición de pasodobles de Billo Frómeta. Con el reconocimiento dentro del bolsillo, el cantante toma la decisión de lanzarse como solista en 1976 y emprende una gira exitosa por las principales plazas de Estados Unidos. Incluso, en Houston (Texas) fue nombrado Ciudadano Honorífico y Embajador de la Buena Voluntad.
Morales, quien lideraba la organización musical que lleva su nombre, cumplió con la realización de un concierto de despedida del año 2016 en el Salón Venezuela, en Caracas, de donde salió ovacionado. Minutos después, ya cuando despuntaba el 2017, sufrió un infarto fulminante en la ambulancia que lo transportaba hasta el centro de salud más cercano. Se apagó la voz de “El Gitano Maracucho”, un hombre que se dedicó a amenizar con sus interpretaciones las vidas de los demás.