Y los ganadores son...

Jennifer Lawrence

Los Premios Óscar han sido, en ocasiones, de una obvia posición política: el año pasado, Argo (dirigida y producida por Ben Affleck) ganó el galardón a mejor película. En el filme era evidente la exaltación de Estados Unidos y la estigmatización de un país con el cual está en constante enfrentamiento: Irán. En otros momentos, los jurados entregan el premio más como un homenaje que en reconocimiento por una actuación; quizá sucedió así con el premio a mejor actor de reparto para Heath Ledger por El caballero de la noche. También ha entregado premios merecidos, como el de mejor película a El Padrino y el de mejor actriz a Meryl Streep por La dama de hierro. Existen casos especiales en los que un actor es nominado múltiples veces y en ninguna obtiene el galardón: el irlandés Peter O’Toole tuvo ocho nominaciones y nunca ganó. Y hay otros casos en que han sido nominados pocas veces y han ganado en todas: Christoph Waltz ha sido nominado (y recogido ambas estatuillas) por Bastardos sin gloria y Django sin cadenas. Por eso es imposible conocer la mecánica exacta con que el jurado escoge a sus ganadores: algunas veces los rumores se convierten en realidad y en otras la Academia da la sorpresa. Estos son las apuestas de El Espectador en siete categorías.

Mejor actor de reparto

Michael Fassbender vs. Jared Leto
Michael Fassbender es un actor alemán de ascendencia irlandesa cuya más memorable actuación hasta ahora había sido en ‘Shame’ (2011). Jared Leto no sólo es el líder de la banda 30 Seconds to Mars: es también el protagonista de la memorable ‘Réquiem por un sueño’ (2000). Cualquiera de los dos podría ganar este año en la categoría de mejor actor de reparto. El uno, Fassbender, por interpretar a un esclavista cruel que emana pequeños destellos de frustración y humanidad, sin ceder jamás ante ellos. El otro, Leto, por encarnar en cuerpo y alma a un transexual enfermo de sida y por mostrar no sólo su deterioro y sufrimiento, sino también su esperanza.

Mejor actriz de reparto

Jennifer Lawrence
Esta es la tercera nominación a los Óscar para la actriz estadounidense, nacida en agosto de 1990. De las dos anteriores ganó una como mejor actriz por su papel en el filme ‘Silver Linings Playbook’, en el que actuó junto a Bradley Cooper. El desarrollo de su personaje, una mujer con severos problemas de bipolaridad y depresión, le mereció el galardón. En esta ocasión, Lawrence interpreta a una mujer interesada y confusa en ‘Escándalo americano’, dirigida por David O. Russell. Su personaje encarna el egoísmo, la manipulación, pero también cierta inteligencia sutil y un amor que va más allá del concepto común. Es una mujer llena de contrariedades que Lawrence explora trascendiendo el estereotipo: la justa dosis de desesperación que tiene también mucho de humor trágico.

Mejor actor

Leonardo

El actor estadounidense retrata la excesiva vida de Jordan Belfort, creador de la firma Stratton Oakmont, en ‘El lobo de Wall Street’, dirigida por Martin Scorsese y producida por DiCaprio. La interpretación es en ocasiones exaltada, producto de las adicciones y deseos de Belfort, y en otras calmada y pausada. Como en ‘Django sin cadenas’, DiCaprio logra numerosos matices en su personaje y además crea una imagen de la sociedad a través de su actuación, de aquel entorno ambicioso cuyo dios es el dinero. Con él compiten Matthew McConaughey (‘El club de los desahuciados’), Christian Bale (‘Escándalo americano’), Bruce Dern (‘Nebraska’) y Chiwetel Ejiofor (‘12 años de esclavitud’). Esta es la cuarta nominación de DiCaprio al Óscar: no ha ganado ninguna.

Mejor actriz

Meryl Streep vs. Judi Dench
En esta categoría le apostamos a la experiencia. Aunque Cate Blanchett podría perfectamente llevarse la estatuilla por su actuación en ‘Blue Jasmine’, las interpretaciones de Meryl Streep y Judi Dench no dejan de sorprender. Película tras película, este par de actrices recurren a las sensaciones más profundas de sus personajes y a su expresión en el movimiento, en la puesta en escena: tanto Streep como Dench saben reconocer los conflictos de las mujeres que interpretan y conocen los mecanismos para que la audiencia note angustia, felicidad, dolor o simple indiferencia. Sus personajes, Violet Weston (Streep) y Philomena Lee (Dench), tienen varias dimensiones que se entrecruzan y que ellas expresan con experiencia y tino. Por eso es tan difícil decidir entre las dos: en ocasiones, los premios deberían declararse desiertos por exceso de talento.

Mejor director

Steve McQueen
Estudió arte y diseño en el Chelsea College of Art and Design y bellas artes en el Goldsmiths College, donde comenzó a interesarse por la filmación. Sus películas suelen proyectarse sobre las paredes de un espacio cerrado de una galería de arte, son minimalistas, a menudo en blanco y negro y mudas. Su llegada al cine desde el arte alcanza a reflejarse en la magnífica ‘12 años de esclavitud’. No sólo por esta cinta, sino por la anterior, ‘Shame’ (2011), McQueen debería llevarse la estatuilla.

Mejor película extranjera

‘La cacería’

Mads Mikkelsen es el actor protagónico de ‘La cacería’, dirigida por Thomas Vinterberg. El filme relata la historia de un hombre que es acusado de violar a una niña: todos lo miran con desdén y desconfianza, aunque no tienen ninguna prueba y, en realidad, todo es mentira. ‘La cacería’ juega con las verdades a medias para dibujar una sociedad que juzga sin base y prefiere formar una mentira, convencerse de ella, antes que llegar a la verdad, y que encuentra placentero dañar la reputación de un hombre.

‘El club de los desahuciados’

Fue difícil escoger nuestra candidata a mejor película, siendo que tres obras maestras compiten este año en la categoría: ‘El lobo de Wall Street’, ‘12 años de esclavitud’ y ‘El club de los desahuciados’. Las tres relatan una parte de la historia de Estados Unidos y las tres tienen magníficas actuaciones. Aunque lo más probable es que ‘12 años de esclavitud’ se lleve la estatuilla —no sólo porque es excelente, sino porque visual y compositivamente es hermosísima, artística—, quisimos apostar por la estética de ‘El club de los desahuciados’, un poco más burda, pero con mucho ímpetu.