El auditor General, Jaime Ardila Barrera, advirtió que un alto volumen de contrataciones directas se hacen a dedo y que la mayoría de contratos se utilizan para devolver favores políticos.
"Seguimos observando que la ley 80 es el mecanismo que menos utilizan las instituciones públicas para contratar", dijo Ardila.
Denunció que en este proceso de contratación directa y a dedo se utiliza la 'tercerización', a traves de convenios interadministrativos que "también es una de las situaciones que es bastante preocupante y que los organismos de control venimos llamando la atención sobre este fenómeno".
Insistió el jefe del organismo de control que "buena parte de esa contratación directa para lo único que sirve es para pagar favores políticos".
A juicio del Auditor General, los regímenes especiales que son los que utilizan buena parte de las entidades del Estado, permiten hacer ese tipo de contrataciones directas, porque son empresas industriales o que son sociedades de economía mixta y por eso tienen esa facilidad para hacer este tipo de contratación.
Insistió en que hay que entrar a reformar la ley 80, pues los objetivos no se están cumpliendo.