Al igual que sucedió con la cadena de hamburguesas El Corral hace algunos meses, la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN) le pasó “factura” al restaurante Hard Rock Café Bogotá, ubicado en el centro comercial Atlantis Plaza, y cerró el establecimiento por tres días. La razón: el incumplimientos de los requisitos de facturación exigidos por el Código Tributario.
Para que la DIAN tomara la decisión de ponerle al local del Hard Rock el sello que dice “cerrado por evasión”, se presentaron “errores formales de facturación”. Esto significa que, de acuerdo con el artículo 617 del Estatuto Tributario, los comprobantes de venta que se entregan a los clientes están obligados a denominarse como factura, contener el nombre o razón del vendedor junto a su número de identificación tributaria (NIT), el valor del IVA pagado, el número correspondiente a un sistema de numeración consecutiva, la fecha de expedición, la descripción de artículos vendidos o servicios prestados, el valor de la operación y la descripción de aportes a seguridad social por facturación en el caso de trabajadores independientes o contratistas.
En un comunicado puesto en la puerta del local, la administración del Hard Rock Café reconoce que “en una revisión de facturas se encontró una falta de datos del establecimiento, pero sí estaba el registro de los impuestos de ley”.
La decisión tomada por la DIAN, según la administración del restaurante, “es una medida arbitraria, por lo que solucionaremos esta situación en la manera debida para retomar actividades el día viernes 27 de julio de 2012”.
Horacio Ayala Vela, consultor tributario y exdirector de la DIAN, comentó que existen sistemas paralelos a la facturación de los establecimientos, consistentes en contabilidades ficticias para retener el IVA que se cobra a los clientes. “Hay personas que le dan un papelito al cliente y no una factura. Si ellos (Hard Rock Café) expidieron factura con número e inclusión de IVA, no habría motivo para sanción”.
Según cifras de la DIAN, este año se han recaudado $17,3 billones de IVA, aunque el director de la entidad, Juan Ricardo Ortega, reconoce que al año se evaden en Colombia $20 billones por concepto de este impuesto. Contrabando y contabilidades paralelas en establecimientos son sólo algunos de los mecanismos que llevan a este ‘desangre’ tributario.