Por considerar que es un impuesto que hace mucho daño al país, y es antitécnico, la presidenta de la Asociación Bancaria y de Entidades Financieras (Asobancaria) Maria Mercedes Cuéllar consideró que este tributo debe ser desmontado para desestimular el uso del efectivo que alcanza niveles de los años 40.
Ante el anuncio del ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, de postergar el desmonte e incluir su continuidad en la próxima reforma tributaria que alista el Gobierno, la presidenta de Asobancaria, dijo que es muy malo para el país porque el uso del efectivo se ha devuelto a las cifras de los años 40. “Ya el ministro anunció que iban a postergar el desmonte y realmente eso le hace mucho daño al país. Pero es efectivo para recaudar impuestos”, dijo la titular del gremio que representa a los banqueros.
Señaló que por culpa de este servicio el país es uno de los que más usa el efectivo en el mundo, estamos como si no hubiera ningún desarrollo de la banca en el uso del efectivo.
Cuando se habla de desmontar este tributo todos dicen que sí, pero a la hora de tomar la decisión nadie lo desmonta, dijo María Mercedes Cuéllar.
La dirigente gremial resaltó que antes de aprobar este impuesto “en los medios de pago de la masa monetaria solamente había un 30% en billetes y ahora es 50 (por ciento) eso vale como cerca de 18 billones de pesos”.
Durante la presentación del Presupuesto General para 2015 que el Gobierno del presidente Santos aforó en 167 billones de pesos, excluyendo la deuda y los intereses, el ministro de Hacienda, dijo que alista una reforma tributaria para aplazar el desmonte del impuesto del cuatro por mil y para continuar con el impuesto al patrimonio.