El 2011 será recordado como el año en que los colombianos conquistaron su propio mercado de valores. Más de un millón de personas naturales, para ser precisos, quienes aprovecharon las ocho grandes emisiones (Grupo Aval, Grupo Nutresa, Avianca-Taca, Ecopetrol, Davivienda, Sura, Almacenes Éxito y Empresa de Energía de Bogotá) para realizar su primera inversión bursátil.
Para la Bolsa de Valores de Colombia (BVC), aquellas apuestas individuales ascendieron a $19.774 millones de pesos a octubre pasado, lo cual representó un incrementó del 23% frente a los $16.017 millones registrados en el mismo periodo del año anterior. Gracias a este resultado, el mercado bursátil se ha convertido no sólo en una nueva alternativa de ahorro, sino en la fuente de financiación preferida por las empresas colombianas, que en los últimos tres años han obtenido de ella $50,02 billones.
“Es una cifra histórica. Demuestra que el mercado de capitales colombiano ha crecido y que está dispuesto a financiar tanto a la industria como a las necesidades de inversión del país”, afirmó Juan Pablo Córdoba, presidente de la BVC, al presentar los resultados a octubre, entre los que sobresalen ingresos para la Bolsa por $57.584 millones y su Ebitda de $26.316 millones.
Las emisiones, incluso, le cambiaron la cara al índice de capitalización Colcap (las 20 empresas más grandes del mercado), que hoy en día está conformado en un 60% por empresas que finalizaron su colocación de acciones. Entre ellas se destaca el caso de Nutresa, que pasó de transar $2.197 millones a $5.459 millones tras su proceso, y Almacenes Éxito, que aumentó su flotación en $4.031 millones.
Pero en 2012, el auge podría no repetirse. Por eso, la BVC quiere darle un impulso al mercado de derivados (instrumentos complejos) con la reestructuración de los productos existentes y la creación de nuevas opciones de inversión. “Estamos haciendo algunos cambios, como convertir en mensuales los contratos trimestrales o reducir de US$50.000 a US$5.000 los montos mínimos en divisas”, comentó Córdoba.
La decisión se debe a los buenos resultados que ha cosechado el ETF iColcap, que gestiona un promedio diario de US$3,4 millones y es, actualmente, el séptimo valor más transado del mercado.
Entre los productos que verían la luz estarían un contrato basado en el índice de inflación y otro en indicadores bancarios.