La estrategia antihurto

La iniciativa del Gobierno para frenar el robo de celulares impuso nuevos controles a la venta de equipos. /Luis Ángel

Los usuarios de telefonía móvil, en especial los que están suscritos bajo la modalidad prepago, vivirán un cambio radical en el servicio a partir del 1º de octubre. Ese día vencerá el plazo para que actualicen sus datos ante los operadores móviles e ingresen a la llamada “base de datos positiva”, otro de los elementos con los que el Gobierno busca frenar el robo de celulares en el país.

A partir de esa fecha, para cualquier trámite que realice un usuario prepago, por ejemplo reponer o activar un equipo, se tendrá que presentar la prueba de adquisición del mismo, la cual sólo se entregará a quienes actualicen su información.

“Esta es una medida más que tiene entre sus objetivos hacerle frente al robo de celulares, que hace parte del grueso del hurto a personas”, indicó Francisco Lloreda, alto consejero presidencial para la Seguridad Ciudadana, y además hizo un llamado para que este proceso se agilice.

Según datos del Ministerio de las TIC, de los 38,91 millones de usuarios prepago en Colombia apenas el 10% ha reportado su información. “Queremos reiterarles a los usuarios que este requisito no tiene costo alguno y se puede realizar por internet o en los centros de atención de cada uno de los operadores móviles”, dijo María Carolina Hoyos, viceministra TIC, quien aclaró que la información de los clientes pospago ya ha sido aportada por las compañías del sector.

Esta medida hace parte de la Estrategia Nacional contra el Hurto de Celulares, lanzada este año por el Gobierno y que impone mayores controles a la importación, venta y activación de equipos móviles. De esta manera, los únicos vendedores autorizados son los operadores o los puntos comerciales aprobados por ellos.

Otra de las restricciones quedó consignada en la resolución 3530 expedida el pasado 10 de febrero por la Comisión de Regulación de Comunicaciones, según la cual cada vez que un usuario cambie de celular y decida entregarle su actual equipo a un familiar, amigo o conocido, deberá legalizar el traspaso ante el operador móvil tras llenar un acta oficial (ver facsímil).

“Lo que buscamos es que de ahora en adelante cada celular en Colombia tenga un dueño identificado. Hasta ahora, cuando una persona acudía a un vendedor ilegal le vendían un equipo con un IMEI (número único de identificación de cada celular, por sus siglas en inglés) de otro país, por ejemplo, Pakistán; a partir de octubre sólo se activarán equipos cuyos IMEI estén en la base de datos”, explicó Lloreda.

De acuerdo con cifras de la Policía Nacional, el robo de celulares durante los últimos años oscilaría entre 750.000 y 3 millones de unidades, fenómeno que comprende el 40% de los hurtos a personas en el país y que es efectuado por bandas delincuenciales. Los equipos robados tienen una demanda directa en países vecinos como Ecuador y Perú, mientras que el principal origen de los equipos de segunda es China.