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La estrategia polaca en Colombia

Al país llega una misión de empresarios polacos interesados en la minería. La historia de cómo esta Nación le hace el quite a la crisis de la zona euro y sale de compras por la región latinoamericana.

Jorge Sáenz / Polonia*
25 de noviembre de 2012 - 09:00 p. m.
Arriba, Beata Stelmach, subsecretaria de Estado del Ministerio de Relaciones Exteriores y Jan Krzysztof Bielecki, exprimer ministro; abajo, Andrzej Raczko, vicepresidente del Banco Nacional e Ilona Antoniszyn-Klik, subsecretaria de Estado del Ministerio de Economía.
Arriba, Beata Stelmach, subsecretaria de Estado del Ministerio de Relaciones Exteriores y Jan Krzysztof Bielecki, exprimer ministro; abajo, Andrzej Raczko, vicepresidente del Banco Nacional e Ilona Antoniszyn-Klik, subsecretaria de Estado del Ministerio de Economía.

Polonia ha pasado bailando por la crisis de la economía de los países de la Unión Europea (UE). Parte de este milagro se debe a que está por fuera de la zona euro, una posición que le da maniobra de acción en su política monetaria.

Para blindarse del contagio de sus vecinos comunitarios, el gobierno polaco viene ejecutando medidas que suavicen el impacto del euro en reemplazo del zloty, actual moneda. La eurozona es una residencia preciosa, pero necesita que se retoque un poco, dicen las autoridades polacas. En un plazo de entre tres y cinco años se plantea el ingreso a la zona euro.

“Seguimos interesados en unirnos al bloque económico, pero previamente hay que implementar reformas muy importantes para asegurar su estabilidad a largo plazo”, admite Andrzej Raczko, vicepresidente del Banco Nacional de Polonia.

Terminada la segunda guerra mundial, Polonia sufrió la destrucción de su capital Varsovia en más del 90%. Luego el país estuvo bajo la órbita del comunismo hasta 1989, cuando emergió el descontento en la ciudad de Gdansk, en el astillero Lenin, desde donde se catapultó la imagen del electricista Lech Walesa, fundador del sindicato Solidaridad, hasta convertirse en presidente de la República.

Entonces el país pasa de una economía cerrada a otra de libre mercado, logrando un crecimiento sostenido de su Producto Interno Bruto (PIB). “En Polonia nosotros enfocamos estos acontecimientos desde la perspectiva del año 1989 y los inicios de la transición, cuando terminó el comunismo en Polonia. Entonces le tocó al gobierno de Solidaridad afrontar problemas muy similares a los que en estos momentos tienen que afrontar muchos gobiernos europeos”, dice el exprimer ministro polaco Jan Krzysztof Bielecki.

Recuerda que durante 11 años la economía polaca no tuvo liquidez. A partir del momento de declarar la ley marcial en el año 1981, dejó de servir su deuda externa y fue apenas en abril de 1991 cuando se llegó al primer acuerdo con los deudores de las instituciones estatales con el llamado Club de París. “Tardamos 14 años en llegar a un acuerdo con los acreedores privados del llamado Club de Londres”, dijo.

Luego de la transición de 1989 se presentaron varios hitos que marcaron procesos de cambios económicos, políticos y legales, recuerda Beata Stelmach, subsecretaria de Estado del Ministerio de Relaciones Exteriores. “En 1996 Polonia ingresó a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico. Comenzamos a ser miembros del club de las economías más grandes del mundo. Tres años después se produjo el ingreso a la OTAN. Pero el cambio más profundo fue el de las negociaciones de adhesión a la Unión Europea, hecho que tuvo lugar en 2004”, dijo al recordar que el primer paso fue ingresar a la Organización Mundial del Comercio (OMC).

Polonia se está poniendo “muy sexy” para atraer al inversor extranjero, argumenta Iwona Chojnowska, del departamento de inversión extranjera. Beata Stelmach destaca que su país acoge mucha inversión extranjera y desde la transición “hemos atraído 140.000 millones de euros”. El intercambio comercial de Polonia con el resto del mundo aumentó en 15 veces, sostiene.

Una de las incursiones comerciales de Polonia en Latinoamérica se concretará en Colombia y Brasil. “Damos mucha importancia a las relaciones con América Latina. Hay enormes oportunidades recíprocas. Por un lado, Polonia se encuentra en una situación muy favorable en los aspectos económicos y financieros, si la comparamos con Europa y con el resto del mundo. Tanto Colombia como Brasil son de los países que saben solucionar los problemas de la crisis perfectamente. Es muy importante saber aprovechar la situación de crisis que estamos viendo y saber trabar relaciones de ambas partes tomando ventajas de la situación actual”, considera la subsecretaria de Estado del Ministerio de Relaciones Exteriores de Polonia.

Según la funcionaria, las relaciones diplomáticas entre Colombia y Polonia se establecieron en 1933, no obstante que la Polonia democrática comienza en 1989, porque fue entonces “cuando celebramos las primeras elecciones democráticas después de la Segunda Guerra Mundial. Pero también fue entonces cuando se organizó la primera visita oficial de un presidente de Colombia a Polonia: Virgilio Barco Vargas”.

Luego vienen encuentros en otros eventos, como en 2008 con ocasión de la Cumbre América Latina-Unión Europea en Lima. Y así irán desarrollándose estas actividades hasta el encuentro del ministro de Asuntos Exteriores polaco con la ministra de Relaciones Exteriores colombiana.

“En breve vamos a organizar una misión a Colombia para llevar a los empresarios interesados a establecer relaciones económicas con ese país. Cuando analizamos los números relacionados con el intercambio económico o comercial entre ambos países, estos números no corresponden al potencial que tienen ambos países. Colombia es el quinto socio comercial para Polonia en América Latina. En estos momentos lo que prevalece claramente son las importaciones desde Colombia y nuestras intenciones son animar a los empresarios polacos a exportar a Colombia”, dijo.

En Polonia se prepara una misión del sector de servicios de minería para visitar a Colombia. No se trata de una simple venta sino de intercambiar experiencias, destacó Ilona Antoniszyn-Klik, subsecretaria de Estado del Ministerio de Economía. Los representantes del Gobierno y empresarios polacos estarán en Colombia el 26 de noviembre.

Polonia ofrece al empresario colombiano una serie de alternativas comerciales en sectores como industria farmacéutica, siderurgia, marítima y naval, automotriz, cristalería, alimentos y transformación de la madera. El gobierno polaco continúa con el proceso de privatización de varias empresas.

Este proceso se inició con la transición en 1989. Años después nace la bolsa de valores de Varsovia que tuvo la primera sede en el edificio que albergó al partido comunista polaco. Actualmente es la más dinámica de esta parte de Europa, toda empresa privatizada lista en el mercado de valores local.

El año pasado Polonia tuvo un crecimiento del PIB de 4,3%. Es el único país de la Unión Europea que en ningún momento ha entrado en recesión en esta época de crisis. En la actualidad Polonia es la sexta economía europea y la número 20 en el mundo.

También es un importante mercado de 38 millones de habitantes, rodeado por la Unión Europea y por los estados no comunitarios.

Política fiscal y monetaria

Polonia ha consolidado una política fiscal y monetaria muy conservadora, ejecutando mecanismo de seguridad y de control como el nivel máximo admitido de la deuda pública. El sistema de depósito bancario es el más fuerte de toda Europa, “hemos evitado la burbuja inmobiliaria. No hemos caído en ninguna de las trampas económicas y bancarias y logramos resistir a la tentación de crecimiento fácil y rápido. Tenemos un mercado interno que ha crecido como elemento estabilizador”, dice el analista Pawel Swieboda, presidente de demosEUROPA.

En la Constitución polaca se define el valor máximo de la deuda pública: un 60% y basta, tras pasar el 50% suenan las alarmas y al llegar al nivel del 55% quedan bloqueadas las posibilidades de aumentar el endeudamiento público, explica el exprimer ministro Jan Krzysztof Bielecki.

“También en el sistema de hacienda pública polaco, hace trece años implementamos unas soluciones muy radicales en el tema de provisiones de jubilación. Lo que quiere decir que a partir de 1999 cada polaco tiene su cuenta de jubilación particular que se conoce con el nombre de cotización definida”, destaca.

A juicio del exprimer ministro, si la deuda pública es del 55% y los fondos de jubilación tienen un 15% del PIB, si se llegaran a nacionalizar esos fondos, entonces la deuda pública polaca se reduciría al 40%. “La mayoría de países comunitarios no ha implementado este tipo de reformas de pensiones”, advierte.

Cuando se llega a un endeudamiento del 55%-60% se ponen en funcionamiento ciertas herramientas que obligan al cumplimiento de unos procedimientos, reafirma el vicepresidente del Banco Nacional de Polonia. “Por eso la deuda pública de Polonia se encuentra por debajo del 55%, lo que quiere decir que es un valor inferior comparado con la mayoría de países de la Unión Europea, incluso superamos a Alemania porque ellos tienen un nivel más alto. También logramos controlar el déficit público sin afectar el desarrollo económico de los últimos tres años”, explicó.

Para el banquero central, en 2011 el déficit creció porque era necesario mantener un estímulo fiscal con el que se lograra el desarrollo económico. Ahora ese déficit del sector público se encuentra en 3,4%. Esta es la razón por la cual Polonia goza de buena reputación en los mercados financieros.

Desde la adhesión a la UE el comportamiento de la inflación es muy estable, en la actualidad es de 3.8% anual, considera Andrzej Raczko, al explicar que el objetivo es mantenerla en un nivel del 2,5% con un margen de un punto hacia arriba o abajo. “Esperamos que en el plazo de un año o año y medio se reduzca la inflación a la meta objetivo”, destacó.

Las perspectivas de desarrollo económico de Polonia están muy ancladas al comportamiento de crecimiento de la Unión Europea, pero sobre todo de Alemania debido a que el 25% de las exportaciones polacas se destina a ese mercado.

“Seguimos interesados en unirnos a la eurozona, pero previamente hay que implementar reformas muy importantes en la eurozona para asegurar su estabilidad a largo plazo”, señala Andrzej Raczko, vicepresidente del Banco Nacional de Polonia

 

 

*Este artículo fue posible por invitación del gobierno polaco.

Por Jorge Sáenz / Polonia*

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