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Tras la polémica generada en el país por el aumento de las tarifas de energía anunciadas por el Gobierno, nueve congresistas, entre ellos Iván Duque, José Name y Ernesto Macías, citaron este martes a plenaria al ministro de Minas y Energía, Tomás González, al director de la Creg, Jorge Pinto y el de la UPME, Jorge Valencia, todos responsables de la regulación, proyección y funcionamiento del sistema eléctrico.
El debate está enmarcado en torno a que es falsa la idea de que el alza de los costos de este servicio público sea consecuencia del Fenómeno del Niño y que más bien es consecuencia de una regulación que no fue actualizada a tiempo y falta de previsión.
Para esta cita, los congresistas enviaron 43 preguntas que contemplan las dudas que tienen sobre los hechos recientes que, a pesar de los mensajes del Gobierno, para algunos sigue amenazando la disponibilidad del servicio por lo que no se descarta un “apagón”.
El Espectador tuvo acceso a las respuestas entregadas por el Ministerio de Minas y Energía y la Superintendencia de Servicios Públicos.
En el documento se piden respuestas sobre la labor que ha desempeñado la Superservicios en esta crisis del sistema eléctrico. La entidad aclaró que “una vez conocida la indisponibilidad de algunos agentes generadores, esta Superintendencia inició de manera inmediata la recolección de evidencias con el fin de adelantar las investigaciones pertinentes y acometer una vez adelantado el debido proceso, las acciones de control que resulten de las actuaciones administrativas ya mencionadas”.
Sobre el polémico cargo por confiabilidad ($15 billones pagados por todos los usuarios desde 2006) según el ente de control, “es menester indicar que si bien la metodología busca el incentivo a las inversiones en expansión del parque generador, lo cierto es que no se establece a los agentes los criterios de utilización de los recursos”.
Otro de las dudas que surgieron sobre ese cargo, que según ha explicado el gremio sirve para mantener en full operación las plantas de generación, es por qué unos generadores a pesar de tener equipos desactualizados siguen recibiendo estos recursos, que en algunos casos son mayores al de plantas más modernas.
González respondió que “no se está? premiando la ineficiencia de las empresas generadoras, lo que se está? reconociendo es una parte de los costos adicionales (costos atípicos) en que se incurre como consecuencia de estos eventos extraordinarios y simultáneos, que afectaron a las generadoras térmicas, todo ello, basados en los principios de eficiencia económica y suficiencia financiera que deben reflejar las tarifas en condiciones anormales como las actuales”.