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En un escenario simulado de extremos choques externos, el Fondo Monetario Internacional (FMI) determinó que “el sistema financiero colombiano es resistente a choques externos extremos”.
El superintendente Financiero, Gerardo Hernández, indicó los representantes de la entidad de crédito multilateral tuvieron en cuenta tres aspectos: solvencia, liquidez y contagio. Dijo que los funcionarios del FMI “nos espulgaron” al momento de aplicar las pruebas de estrés que determinó el grado de preparación y solvencia que muestran las entidades financieras colombianas.
Hernández explicó que en materia de solvencia se tuvo en cuenta una intensificación de la crisis de deuda de Europa y se simuló un evento dos veces más fuerte de lo que se vivió con la quiebra de Lehman Brothers, el cuarto banco más grande de los Estados Unidos.
También se tuvo en cuenta una crisis en los principales socios comerciales de la región, y el incumplimiento, al mismo tiempo, de los 100 mayores deudores del sistema financiero colombiano.
El superintendente manifestó que en materia de liquidez, el escenario evalúo los requerimientos extremos a diferentes plazos, y en cuanto a contagio, el impacto midió las operaciones interconectadas entre entidades del sistema financiero.
Gerardo Hernández insistió en que la banca colombiana pasó el examen a que fue sometida por parte de los representantes del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Además el análisis resaltó que la supervisión del sector bancario, asegurador, de valores y la infraestructura financiera presentan un adecuado cumplimiento de los estándares internacionales y que el mercado de capitales se ha diversificado.
También destacó el informe que el financiamiento de vivienda se está desarrollando en un marco de regulación prudencial, promovido por una política pública adecuada.
Morosidad de la cartera
Hernández destacó que el sector financiero en situaciones internacionales bien difíciles, “sigue teniendo una solidez muy importante, y además tiene municiones suficientes para acompañar con el crédito al crecimiento de la economía en lo que resta del año y de 2013”.
Sobre el comportamiento de la cartera en general, dijo que ha venido moderando su crecimiento. Destacó que la preocupación sobre un posible disparo de los créditos de consumo fue disminuyendo debido a los efectos de las medidas adoptadas para evitar un desborde de este tipo de préstamos. “Vamos a hacer el monitoreo para evitar que no se presente una situación de sobreendeudamiento de las familias y de los hogares, especialmente en el crédito de consumo”, dijo el funcionario.
Explicó que en materia de provisiones, hay unos muy “buenos colchones”, pero no descartó que en cualquier momento se pueden ajustar las medidas ya adoptadas.
Destacó que lo importante es que no se frenen los créditos para la industria y el comercio, “que es muy importante en este momento, dada la situación que se viene presentando en el país, y las proyecciones de crecimiento de la economía que se tienen para finales de año”.
Frente a la evolución de la cartera vencida, el funcionario explicó que en los créditos comerciales la morosidad crece 12,77%, en consumo 35%, en vivienda 1,3% y en microcrédito 21,7%.
“Eso refleja la preocupación que tenía el Gobierno y la Superintendencia (Financiera) y es que en materia de consumo se veía un deterioro un deterioro en el comportamiento de la calidad de la cartera, y por esa razón se tomaron las decisiones de establecer esas provisiones”, manifestó Gerardo Hernández.