Lagarde: "Colombia está en condiciones de prestar y ofrecer servicios al FMI"

La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, aseguró el lunes que Colombia presenta condiciones económicas óptimas para prestar y ofrecer servicios a esa institución.

En una breve declaración tras su entrevista con el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, Lagarde afirmó que "Colombia está en una situación en la que le puede ofrecer al Fondo su ayuda, cosa que no se podía en el pasado".

A su turno, Santos también se refirió a que esta visita de Lagarde, que es la primera que hace a Colombia, es muy diferente a las que hicieron otros directores gerentes en el pasado, "en momentos de angustia" en los que se precisaba de la ayuda del FMI.

"Esta es una visita totalmente diferente, es más bien una visita de cortesía", agregó Santos.

En su encuentro, Santos y Lagarde comentaron también la situación económica que se vive en Europa y Estados Unidos, que según la gerente del Fondo "no es tan sólida y estable como la colombiana".

Lagarde, quien se reunió con pequeños y medianos empresarios colombianos y con el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, recalcó que Colombia ha tenido en los últimos años "una política macroeconómica que le ha dado mucha estabilidad al país".

"Colombia en este momento tiene un déficit muy pequeño y una deuda muy balanceada, y por eso la situación macroeconómica es muy prometedora", señaló la funcionaria.

La gerente tiene previsto entrevistarse el martes con la Junta Directiva del Banco de la República y ofrecer una rueda de prensa en la sede del Emisor, en la que ofrecerá las conclusiones de la visita de dos días antes de partir hacia Chile en horas de la noche.

El FMI ha alabado las políticas puestas en marcha por los Gobiernos chileno y colombiano durante la crisis global.

De ambos ha destacado la prudencia macroeconómica y las políticas para evitar desequilibrios ante un escenario volátil.

Colombia mantiene en vigencia con el FMI una línea de crédito de de algo más de 6.000 millones de dólares, conocida como Línea de Crédito Flexible (LCF), una especie de seguro al que pueden echar mano los países suscriptores en momentos de emergencia, aunque las autoridades de Bogotá han afirmado que no tienen intención de utilizar esos fondos.