Al menos 30 municipios de Nariño, incluida su capital Pasto, piden al Gobierno nivelar por abajo el precio de la gasolina para evitar que se sigan presentando protestas de los conductores de servicios públicos.
La diferencia entre la cotización del galón de gasolina entre unos municipios del mismo departamento es superior a los 2.000 pesos, que obliga a los conductores de la capital a tanquear en los lugares donde es más barata, obligando a hacer largas filas y provocando un pronto desabastecimiento del combustible en las zonas donde es más barato.
Varios congresistas estiman que el Gobierno tendría que desembolsar cerca de 10.000 millones de pesos, hasta diciembre, para llenar el faltante por la diferencia de precios.
El ministro de Hacienda, Juan Carlos Echeverry, admitió que se cometió un error permitiendo el menor cobro de la gasolina en esos municipios, donde todos no son de frontera.
Ante un grupo de congresistas de Nariño, el ministro de Hacienda se comprometió a buscarle una solución al problema. Para ello se desplazará la semana próxima, con su colega el recién posesionado ministro de Minas y Energía, Mauricio Cárdenas, a la capital nariñense.
En Pasto se venden por día alrededor de 1,2 millones de galones de gasolina que se ha visto afectada la comercialización porque es más barato adquirir el combustible en las regiones vecinas.