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Tal y como lo habían pronosticado la mayoría de bancos, comisionistas de bolsa, gremios y académicos encuestados por la Asociación Nacional de Instituciones Financieras (ANIF) en un reciente sondeo, la junta directiva del Banco de la República durante su sesión de ayer tomó la decisión de aumentar las tasas de interés en 25 puntos básicos, con lo cual pasarán a 3,75%. Una de las razones para este incremento es que la inflación ha ido convergiendo hacia la meta del 3% y que el crecimiento económico ha dado señales de estabilidad en lo que va de este año.
José Darío Uribe, gerente general del Banco de la República, sostuvo tras la reunión que una inflación moviéndose hacia la senda del 3% es compatible con un aumento en los tipos de interés. “Un ajuste gradual reduce la necesidad de cambios bruscos. La junta consideró prudente un aumento de 25 puntos básicos. La decisión fue unánime”.
“El pronóstico macroeconómico indica que la demanda interna continuará creciendo a buen ritmo y que la economía se acercará al uso pleno de su capacidad productiva en 2014. Al mismo tiempo, la tasa de desempleo desestacionalizada mantiene su tendencia descendente”, aseguró el gerente del Emisor, y añadió que el Banco estima que el crecimiento promedio de los socios comerciales de Colombia (como Estados Unidos y la Unión Europea) sea similar al visto en 2013.
Mauricio Cárdenas Santamaría, ministro de Hacienda y Crédito Público, aseguró que en este momento la economía del país “ha retomado una senda de crecimiento que coincide con el potencial de la economía. El consenso de los analistas sugiere que el crecimiento será de 4,6% este año. La proyección del Gobierno es 4,7%. Hay unidad de criterio; la economía arrancó el año sólida. Eso lleva a pensar que se está cerrando la brecha entre el producto potencial y el nivel de actividad”.
En cuanto a la compra de divisas para evitar que el precio del dólar caiga, Uribe explicó que el cupo de US$1.000 millones —que el Emisor había planeado usar entre abril y junio— será usado en su totalidad y precisó que el Banco ha venido realizando adquisiciones de dólares que oscilan entre US$18 millones y US$19 millones diarios.
Al respecto, el ministro de Hacienda agregó que para el Gobierno ha sido prioritario abastecerse de dólares en medio de un momento en que es atractivo hacer compras. “Hay que tener un stock de dólares. Por eso usamos excedentes de liquidez con los que contamos”.
Cárdenas recordó que ha habido elementos coyunturales que han hecho descender el precio del dólar. “Hay un mayor apetito de los inversionistas por los papeles de deuda de nuestro país; consideramos que eso debe tener una respuesta”.
En cuanto al comportamiento de la tasa de desempleo (que en abril fue de 9%), sostuvo que la economía ha dado lugar a la generación de nuevos puestos de trabajo en sectores como la industria y que la meta del Gobierno es que para finales de este año la tasa de desocupación converja hacia el 8%. “Al final del año, el Producto Interno Bruto observado coincidirá con el PIB potencial”.
En opinión del presidente de la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco), Guillermo Botero Nieto, no era necesario subir las tasas de interés, ya que la inflación del país está controlada. “Esto nos va a llevar a tener tasas del 4,25% en el curso de los próximos meses. Automáticamente se dispararán las tasas de colocación del sistema financiero”.
Adicionalmente, señala el directivo, el hecho de aumentar los tipos le dará “un golpe violento al dólar. No hay que sorprenderse cuando la tasa de cambio caiga por debajo de los $1.900. Ese es un nivel que no les sirve a los exportadores. Además, el Banco pierde sumas ingentes de dinero tratando de defender la tasa de cambio con compras de divisas que no son suficientes”.
hsandoval@elespectador.com
@hector_sandoval