Exdirector del departamento de Filosofía de la U. de los Andes, acusado de plagio

Por los pasillos de la Facultad de Filosofía de la Universidad de los Andes corre un rumor: el libro Introducción a la lógica moderna, publicado en 2007 por Ediciones Uniandes y utilizado hasta diciembre de 2013 como texto de consulta por cientos de estudiantes en varias universidades de Bogotá, podría ser un plagio del libro The Logic Book, texto publicado por la editorial McGraw-Hill en el año 2002.

El autor del libro publicado por Uniandes, y quien presuntamente copió fragmentos del texto de McGraw-Hill, es el académico Andrés Páez Peñuela. Profesor de lógica, doctor en filosofía de la Universidad de Nueva York, miembro de la Sociedad Colombiana de Filosofía y de la junta directiva de la Sociedad Latinoamericana de Filosofía Analítica, Páez ejerció, desde 2007 y hasta hace unos pocos días, el cargo de director del Departamento de Filosofía de los Andes.

Tras recibir la denuncia en la que se planteaba la posible copia del libro de lógica, el decano de la Facultad de Ciencias Humanas, Hugo Fazio Vengoa, recibió por parte del profesor Páez los respectivos descargos de la acusación: “El profesor me entregó su versión de los hechos. Con estos antecedentes se procedió a buscar académicos expertos en el tema, uno en Colombia, otro en el Cono Sur y otro en España, para tener, con estas evaluaciones, un panorama más completo. En eso va el asunto”, declaró el director académico.

Sobre este polémico caso, el profesor Andrés Páez manifestó: “Se está llevando a cabo en este momento una pesquisa con evaluadores internacionales para tener una base sólida que pueda desvirtuar las acusaciones anónimas en mi contra”.

La primera edición de 2007 se agotó y de ella cada libro se vendió a $53.000. En la segunda edición se imprimieron 500 ejemplares, cada uno a un precio de $70.000. Esta comercialización se detuvo hace unas semanas, cuando la Facultad de Filosofía dio la orden de retirar el libro de las vitrinas.

Los colegas de Páez lo reconocen como un académico con una reconocida trayectoria y numerosas publicaciones en revistas latinoamericanas. “Sería muy difícil creer que pudiera arriesgar toda su carrera por copiar un libro de texto básico, un manual que no implica un mayor reto intelectual”, manifestó Carlos Alberto Cardona, profesor de filosofía de la U. del Rosario.

¿Sombras de obras?

Tras evaluar fragmentos del libro, un filósofo y profesor de lógica universitaria manifiesta que hay una enorme similitud entre los ejemplos presentados correspondientes al libro de lógica de Páez y al de McGraw-Hill. Esto se puede apreciar sobre varios aspectos: en el contenido del texto, en los ejemplos y los ejercicios utilizados. El docente concluye que se podría llegar a pensar que sí hubo una intención de copiar algunas cosas del libro de McGraw-Hill: “En mi parecer, los ejemplos presentados en la denuncia sí serían una prueba suficiente para investigar un caso de posible plagio”.

Por otra parte, el profesor Carlos Cardona señala que cabría la posibilidad de que esa semejanza entre un texto y otro se deba a que las obras son manuales básicos y, por lo tanto, en ellas el tipo de diagramas, los ejemplos y los ejercicios utilizados son canónicos, es decir, son los que se utilizan tradicionalmente en esta clase de textos. “No me sorprendería encontrar este tipo de similitud en ejercicios y ejemplos en otros libros de lógica”, indica el experto.

Alfonso Cabanzo es catedrático de lógica y autor de un libro en esta área de la filosofía. Según él, es muy difícil encontrar ideas propias en una asignatura como esta, y sobre los fragmentos examinados indica que “puede haber un descuido al no poner la referencia bibliográfica en algunas partes, sin embargo, las definiciones y las ecuaciones en lógica son universales”.

¿Qué debe hacer la universidad?

El abogado Wilson Ríos Ruiz, especialista en propiedad intelectual y quién participó en la elaboración del reglamento interno de propiedad intelectual de la U. de los Andes, considera que en este caso la actuación de la universidad ha sido la correcta.

El primer paso ante una denuncia de este tipo, afirma Ríos, es que una autoridad académica escuche las versiones de los involucrados. Después se debe conformar un grupo de especialistas que pueda dar un concepto profesional. Con base en ese concepto, un consejo de profesores tomará la decisión disciplinaria correspondiente, “en el caso que lo amerite”, enfatiza Ríos.

Lo que sigue en este caso es esperar la decisión que tome el comité de expertos.